martes, 15 de septiembre de 2015

Les plantes medicinals per Flora Catalana

MANUAL DE PLANTAS MEDICINALES
Autor: Jordi Cebrian
 
 
Usos de las plantas clasificadas por trastornos o destinatarios:
PLANTAS PARA LOS NIÑOS
PLANTAS PARA EMBARAZADAS
PLANTAS PARA LOS MAYORES
PLANTAS PARA EL ÁNIMO
PLANTAS PARA LA DIGESTIÓN
PLANTAS PARA RESFRIADOS Y GRIPE
PLANTAS PARA LAS ALERGIAS
PLANTAS PARA EL CORAZÓN
PLANTAS PARA RELAJARSE
PLANTAS DIURÉTICAS Y ADELGAZANTES
PLANTAS PARA LA PIEL
PLANTAS ANALGÉSICAS
PLANTAS PARA LA MUJER
PLANTAS PARA EL VARÓN
 
 
 
PLANTAS PARA LOS NIÑOS
 
Algunas plantas medicinales, como la manzanilla, la caléndula, el tomillo o el hinojo, pueden brindarnos una alternativa muy válida a los fármacos para aliviar aquellas dolencias frecuentes que afectan a nuestros hijos, desde un simple resfriado, a golpes, inapetencia, otitis o irritabilidad.
 
Aunque cada niño es un caso único y así ha de tratarse, a esas edades tempranas el metabolismo actúa de manera muy diferente al de una persona adulta, se muestra más rápido y activo, por lo que su sensibilidad a los medicamentos no será la misma. Éstos suelen incidir sobre los síntomas que delatan la dolencia, pero no sobre sus causas reales. En determinadas ocasiones pueden ser incluso remedios demasiado agresivos para un organismo en constante formación. Es por ello que muchas dolencias frecuentes que afectan a los niños, desde la lactancia hasta la preadolescencia, como infecciones diversas, conjuntivitis, otitis, resfriados, indigestiones, diarreas, gases, irritaciones cutáneas, golpes y contusiones, irritabilidad, hiperactividad o insomnio, entre otras, puede ser convenientemente tratadas con plantas medicinales. Son remedios suaves y con escasos o nulos efectos secundarios y generalmente de buen sabor, en forma de infusiones, jarabes o tinturas, que suelen ser bien aceptados por el niño. Familiarizar a nuestros hijos con el sabor, el aroma y el contacto de las plantas medicinales es una opción interesante y valiente, que al menos se debería explorar, y que estimulará en ellos el apego por los tratamientos naturales.
 
1- Manzanilla, para los cólicos
La manzanilla es antiinflamatoria, antiespasmódica, sedante y digestiva, por lo que resulta un remedio muy versátil para enfrentarse a un buen número de afecciones corrientes que afectan al pequeño. Aplicado en la forma de infusión o de tintura a muy pequeñas dosis, la manzanilla no presenta ningún problema y puede ser administrado sin temor a los recién nacidos y a los niños de corta edad. Será muy útil para aliviar la hinchazón abdominal, la falta de apetito o la mala digestión, los cólicos y las náuseas que con frecuencia aparecen a estas edades. Actúa como un tranquilizante suave, que le ayudará a conciliar el sueño y a reducir la excitación nerviosa. Y en aplicación externa, como baño o loción, la manzanilla aliviará las erupciones cutáneas, las molestas irritaciones de su delicada piel y las inflamaciones oculares como la conjuntivitis. La infusión de manzanilla se utiliza también para limpiar las legañas de los ojos del recién nacido y en forma de enjuague, para aliviarle el dolor que provoca la aparición de los primeros dientes.
- Cómo se aplica: En infusión simple, en tintura, jarabe, gotas de extracto, infusiones para baños locales y colirios.
- Dosis: Dos tacitas al día, tras las comidas.
- Precauciones: Evitar la tintura en niños muy pequeños, por su contenido en alcohol.
 
2- Lavanda, para dormir mejor
La aromática lavanda es una planta sedante, de efectos suaves, muy adecuada para los niños entre 3 y 14 años. Tomada en infusión simple, puede ser una buena solución para conseguir que el niño duerma tranquilo y sin interrupciones, disminuye la excitabilidad nerviosa y la hiperactividad. Presenta una moderada acción aperitiva, digestiva y carminativa, que la hace muy útil para estimular el apetito del pequeño, para tratar las típicas indigestiones, y para evitar la acumulación de gases y las ventosidades. Calma la tos en caso de bronquitis y procesos gripales, y está indicada como un apoyo a tener en cuenta en niños asmáticos. Aplicada externamente, sea infusión para baños o gotas o en loción, la lavanda alivia el dolor de oídos y acelera la cicatrización de heridas y rasguños superficiales, dolencias éstas inevitables en los más pequeños.
- Cómo se aplica: En infusión, en tintura disuelta en agua, y esa misma infusión para baños, lavados o para empapar compresas. El aceite esencial, apenas unas pocas gotas, sólo en aplicación externa.
- Dosis: Dos tacitas diarias de la infusión o bien unas 30 gotas de tintura en tres tomas.
- Precauciones: No administrar el aceite esencial por vía oral, y procurar dosis bajas en uso externo, siempre disuelto en aceites vegetales.
 
3- Malva, para el estreñimiento
Es otra de las plantas de efectos suaves y sin efectos secundarios, que podemos administrar sin miedo a los más pequeños de la casa. Es laxante, algo diurética, demulcente, mucolítica, antitusiva y antiinflamatoria. En caso de que el niño lleve unos días en que le cuesta ir de vientre, darle una infusión de flores de malva en ayunas puede ser una buena manera de estimularlo. Pero esta misma planta es muy eficaz para aliviar la irritación de garganta, reducir la tos y la mucosidad, en resfriados y procesos gripales, y aplicada externamente, no es menos útil para rebajar las inflamación oculares y de su contorno, asi como la provocada por picaduras de insectos, rasguños y arañazos.
- Cómo se aplica: En infusión simple o en jarabe, o bien la infusión en colirios, baños o friegas.
- Dosis: Hasta cuatro tacitas al día, en ayunas, en caso de estreñimiento. Y unas 3 cucharaditas de jarabe al día, en caso de afección respiratoria con mucosidad.
- Precauciones: Ninguna
 
4- Anís verde para los gases
Tanto el anís verde como su pariente el hinojo son plantas especialmente indicadas para tratar la acumulación de gases en los niños, ya desde edades muy tempranas. Tienen un sabor grato al paladar que hace que sean generalmente bien aceptadas por el pequeño. Los frutos del anís ejercen una clara acción aperitiva, digestiva y carminativa en el organismo, favorecen la movilidad del estómago y facilitan la eliminación de los gases, cuya acumulación suele ser la causa de cólicos en el recién nacido, con la presencia de molestias, espasmos y malestar general, que es lo que provoca que llore. La decocción de frutos de anís puede ser un buen remedio para despertarle el apetito, para aportarle alivio si ha estado vomitando, para evitar el hipo, el mal aliento y en suma para restablecer  el normal funcionamiento de su aparato digestivo. Se usa también para estimular la expulsión de las lombrices intestinales, y para tratar determinadas infecciones infantiles, como la cándida.
- Cómo se aplica: En infusión para problemas digestivos, sola o combinada, en jarabe, dos o tres cucharadas diarias,  y en tintura disuelta en agua
- Dosis: Dos tacitas diarias, o a lo largo del día, mezclado con el biberón, y tres cucharadas en jarabe.
- Precauciones: No administrar el aceite esencial por vía oral, y por via tópica, debe estar muy disuelto.
 
5- Milenrama para llagas y cortes
La milenrama tiene propiedades digestivas y aperitivas, que en infusión puede ayudar a combatir las náuseas y vómitos del niño y a aliviarle el dolor abdominal provocado por una alteración gástrica. Pero destaca sobre todo por su acción hemostática, antiinflamatoria y cicatrizante, que hace de ella un remedio seguro para facilitar la curación de las típicas llaguitas en piel y lengua, para acelerar la cicatrización de heridas superficiales y rasguños y para rebajar la inflamación provocada por golpes severos, chichones y contusiones varias. Es igualmente útil en quemaduras leves, como las que por desgracia se producen a veces por descuido cuando el niño juega en la cocina. En tales casos se aplica en forma de infusión o utilizando el jugo de la planta fresca.
- Cómo aplicarla: En infusión para problemas digestivos, en jarabe, el extracto líquido, o bien la infusión o el jugo de la planta fresca para aplicaciones externas, a base de baños, masajes, friegas o lavados.
- Dosis: Dos vasitos al día
- Precauciones: No se deben dar dosis altas.
 
6- Pino silvestre para la congestión
Los brotes de pino silvestre, en infusión, mejor mezclados con raíz de regaliz para afirmar su efecto y mejorar su sabor, son una alternativa válida a los fármacos para tratar las afecciones respiratorias que afectan al niño de corta edad y al preadolescente. El pino silvestre  es antiséptico, expectorante y ligeramente inmunoestimulante, y será de gran ayuda en caso de gripe, cuando la fiebre se dispara, para disminuir la acumulación de mucosidad en  senos y bronquios, para tratar las alergias respiratorias, y para aliviar la garganta en laringitis, faringitis y traqueitis.
- Cómo aplicarlo: En infusión, combinado con tomillo, malva y un poco de miel, o bien la infusión en inhalaciones breves y muy controladas (nunca para bebés), en baños locales, instilaciones y lavados.
- Dosis: Dos tacitas al día, mientras dure la congestión.
- Precauciones: Ajustarse a las dosis, que deben ser pequeñas. No usar el aceite esencial por vía oral y evitar una exposición al sol inmediata del pequeño si se le ha aplicado un masaje con el aceite esencial de pino.
 
7- Otras plantas eficaces:
-- Aceite de oliva, para la costra láctea, en masaje suave sobre la zona irritada.
-- Melisa, para la hiperactividad, en infusión simple
-- Regaliz, para los espasmos gastrointestinales y el meteorismo, en gotas de extracto líquido.
-- Tomillo, para los piojos y otros parásitos, la decocción en friegas o masajes.
-- Aceite de ajo, para la inflamación de los oídos, aplicando un trozo de algodón, con el que taponar el oído durante unos minutos.
-- Caléndula, para la piel irritada del bebé, en crema para aplicar en masaje suave.
-- Saúco, para la cándida, en infusión.
 
 
 
 
PLANTAS PARA EMBARAZADAS
 
Plantas medicinales y embarazo no tienen porqué estar reñidos, pero sí es cierto que se deben tomar algunas precauciones.  Náuseas, mareos, estreñimiento, irritabilidad y anemia son dolencias corrientes que pueden ser perfectamente aliviadas con plantas.
 
Durante la gestación, sobre todo en los primeros meses, muchas mujeres sufren diversos problemas, asociados a los cambios hormonales. Aunque no afectan a todas las mujeres por igual, los trastornos más usuales son la aparición de mareos, náuseas o vómitos, una mayor tendencia a la retención de líquidos, anemia por falta de hierro, los calambres musculares y el dolor de espalda, aumento en la incidencia de problemas venosos como varices o hemorroides, estreñimiento, ardor de estómago, flatulencias, y a nivel nervioso, insomnio o lo opuesto, sensación de sopor, ataques de ansiedad y fatiga. Para aliviar estos problemas sin necesidad de tener que recurrir a medicamentos, las plantas medicinales pueden ser una opción a explorar. Pero antes hay que descartar hasta el más mínimo riesgo, y por tanto es imprescindible estar bien informados. Ante todo deben ser evitadas todas aquellas plantas con efectos estrogénicos, que promueven la fabricación de estrógenos, y oxitócicas, que aumentan el tono de las contracciones uterinas, lo que en ambos casos podría generar un riesgo evidente para el embarazo. Es el caso de plantas de uso tan corriente como la salvia, la artemisa, la caléndula, la alfalfa, el trébol de prado, el eleuterococo o la hidrastis. Se desaconsejan también las plantas anticoagulantes como el meliloto, el viburno, la árnica, el ajo, el guaraná o la cúrcuma, salvo en aplicaciones tópicas. Se advierte igualmente de la inconveniencia de tomar laxantes que pudieran ser muy irritantes como la frángula o el sen. Y por supuesto, se alerta muy especialmente del peligro de tomar aceites esenciales por vía oral, por el efecto abortivo de determinados componentes, como el apiol o la tuyona, presentes en el hisopo, el apio, el hinojo, el perejil, la ajedrea y buena parte de las hierbas aromáticas. ¿Qué tomar entonces? No hay por qué preocuparse, aún son muchas las opciones.
 
1- Jengibre, para los mareos
El jengibre Zingiber officinale Roscoe es un estimulante de la digestión, con virtudes carminativas, aperitivas, antiulcerosas y antiepasmódicas. Combate las náuseas matinales y el mareo, y se considera un buen aliado para prevenir o disminuir el riesgo de vómitos. Es una planta muy adecuada para el embarazo, que además aporta un ligero efecto laxante.
- Cómo tomarla: En infusión de jengibre fresco rallado (una cucharadita de los polvos por taza de agua), a tomar en pequeñas cantidades durante el día. También se puede tomar en forma de extracto líquido, unas 30 gotas diarias, en tres tomas.
- Precauciones: El jengibre como antiemético -para evitar los vómitos- debe tomarse contando con asesoramiento médico. Evitar el aceite esencial por vía oral.
 
2- Arándano, para los problemas venosos
Los frutos del arándano Vaccinium myrtillus L. contienen unos pigmentos antociánicos que es lo que les confiere una acción antiinfamatoria y venotónica, favorecen la microcirculación sanguínea y previenen el estancamiento venoso. Son especialmente convenientes en el embarazo, si se producen problemas venosos, como varices, flebitis o hemorroides, y reducen también la incidencia de los edemas.
Cómo tomarlo: En infusión o decocción de los frutos, hasta cuatro tazas al día, o bien los frutos frescos mezclados en el yogur. Se puede tomar también en forma de jarabe (hasta 3 cucharadas al día), en extracto líquido y cápsulas.
- Precauciones: No tomar arándanos en caso de gastritis o úlcera gastroduodenal, por su contenido en taninos.
 
3- Diente de león, para los edemas
Una mayor propensión a padecer de retención de líquidos e hinchazón en los miembros es bastante frecuente en muchas embarazadas. El agua se filtra desde los vasos sanguíneos hasta los tejidos circundantes, provocando esa molesta hinchazón. En tal caso las hojas y la raíz de una planta muy común, el diente de león Taraxacum officinale Weber, pueden ser una ayuda excelente. Son muy ricos en sales potásicas, inulina, mucílagos y flavonoides, lo que explica su potente acción diurética y depurativa. Favorece la emisión de orina, aliviando asi la retención de líquidos y los edemas.
Cómo tomarlo: En decocción simple, o combinada con malvavisco y saúco, 3 tazas al día. Se encuentra también en extracto líquido, cápsulas y comprimidos, o bien el jugo de la planta fresca.
- Precauciones: Es un diurético fuerte, que en caso de tensión alta, debe tomarse bajo control, para evitar descompensaciones.
 
4- Zaragatona, para el estreñimiento
Los problemas para evacuar o estreñimiento puede ir acentuándose conforme avanza el embarazo. El ritmo de defecación normal se suele ver alterado por el aumento de los niveles de progesterona y por la mayor presión de la parte baja del vientre. La toma de laxantes acaba siendo un imperativo, pero se deben elegir aquellos que sean suaves y no irriten las mucosas. Descartadas otras opciones, como el sen, las semillas de psyllum o zaragatona Plantago afra L. se revelan como la más adecuada. Son muy ricas en mucílagos y en sales potásicas, y ejercen un efecto laxante mecánico suave. Están indicadas en estreñimientos crónicos y en caso de gastritis y úlceras gastroduodenales.
- Cómo tomarla: En maceración de la semillas, dos tomas diarias, en ayunas, pero también se encuentra en polvos.
- Precauciones: Las personas diabéticas deben asesorarse bien antes de tomar esta planta.
 
5- Tila, para el insomnio
Dormir bien y de un tirón suele convertirse en un empeño imposible en los últimos meses del embarazo. El malestar general y la dificultad para encontrar la mejor postura en la cama acaban por ser un serio impedimento para conciliar el sueño. La toma de alguna infusión tranquilizante como la tila Tilia platyphyllos Scop. puede ser una buena opción. Actúa además como un eficaz antiespasmódico y relajante muscular, que a muchas embarazadas les sirve para aliviar el dolor de cabeza cuando se presenta.
- Cómo tomarlo: En infusión simple, dos tazas al día, la última una media hora antes de acostarse.
- Precauciones: Está contraindicado en caso de obstrucción de las vías biliares.
 
6- Berro, para la anemia
Para mitigar la anemia y la debilidad física y aportar vigor por el sobre-esfuerzo que comporta el embarazo, el apoyo de una planta con efectos remineralizantes y vitamínicos como el berro Nasturtium officinale R. Br. puede ser una buena solución. Aporta iodo, hierro, fósforo y manganeso, además de vitaminas A, C y B2. Es útil para estimular la digestión y reducir la fatiga.
- Cómo tomarlo: En alimentación (ensaladas), en decocción, juntamente con otras hierbas diuréticas,  y el jugo de la planta fresca.
- Precauciones: Evitar dosis altas.
 
7- Otras plantas útiles:
-- Hojas frescas de frambueso para tonificar el útero, en infusión simple, dos tazas al día
-- Melisa, para prevenir las náuseas, en infusión simple, hasta 4 tazas diarias
-- Kalium carbonicum, remedio homeopático, para la fatiga y las piernas cansadas
-- Aloe vera o cola de caballo para las estrías, en gel o pomada, aplicados en masaje, o bien la tintura de cola de caballo en friegas.
-- Ulmaria y ortiga verde para los calambres musculares, en infusión, dos tazas diarias.
 
 
 
PLANTAS PARA LA TERCERA EDAD
 
Las plantas medicinales son un apoyo interesante para las personas mayores, porque les brindan remedios curativos poco o nada agresivos, con raros efectos secundarios y que inciden de forma conjunta en diversos problemas de salud a un tiempo.
 
Salta a la vista que en muchos herbolarios el sector más fiel entre la clientela es el de las personas de más edad. Los remedios herbarios, en los que muchas veces se funde la tradición con una forma pausada de enfocar los problemas, son percibidos por estas personas como una opción más segura y amable para tratar de aliviar algunas de las dolencias que les afligen. Lo cierto es que las plantas medicinales pueden hacer mucho para favorecer el bienestar de nuestros mayores. En las sociedades occidentales, la vejez tiende a retrasarse y también a ampliarse en años vividos y por vivir. Pero es inevitable que a partir de cierta edad la persona vaya acumulando problemas de salud, que son debidos al desgaste o deterioro de determinados órganos de su cuerpo, con la consiguiente disminución de su funcionalidad. Algunos de estos problemas son la fatiga, la falta de energía y de ganas para acometer los asuntos de cada día, un déficit en el riego cerebral, que puede generar en problemas de memoria y desorientación, problemas cardiovasculares, diabetes, hipertensión, incontinencia urinaria, disminución de la vista y del oído, pérdida de reflejos, mayor propensión a sufrir caídas y fracturas óseas por un exceso de inmovilidad o por la inestabilidad propia de la edad, dolores reumáticos crónicos como la artrosis, insomnio y la amenaza de la depresión. Llevar una vida activa y sana se impone como un primer precepto para garantizarse una vejez, que no tiene por qué ser de renuncias y resignación, sino de nuevos retos y descubrimientos. Para ello, es aconsejable llevar una vida mental positiva y abierta, hacer algo de ejercicio físico adecuado a su edad, cuidar de la dieta, no abusando de determinadas sustancias tóxicas como el café o el alcohol, y procurar no descuidar las relaciones sociales. Es en esta franja de edad cuando mayor uso se hace de los fármacos y mayor la utilización de la atención primaria y de cuidados especiales. Las plantas medicinales pueden ser una opción válida para enfrentarse, o cuanto menos para apoyar el tratamiento de determinadas dolencias asociadas a esta etapa de la vida, y tratar de reducir asi el consumo de algunos fármacos.
 
1- Ginkgo para la memoria
Las hojas del ginkgo Ginkgo biloba L. actúan como un protector neuronal, que favorecen la irrigación sanguínea a nivel cerebral. Se indican como un buen apoyo para aumentar el rendimiento intelectual, para frenar o demorar la pérdida de memoria, y para evitar los vértigos, el zumbido en los oídos y la desorientación que sufren muchos mayores. Es también un tónico venoso y un dilatador de los vasos sanguíneos, muy útil para prevenir accidentes vasculares como la arteriosclerosis y las embolias, para demorar la demencia senil y para tratar los problemas de mala circulación como flebitis, venas varicosas y hemorroides.
- Cómo se toma: En cápsulas o comprimidos, 2-3 hasta tres veces al día; en infusión de las hojas (con arándano y vid roja), hasta dos tazas al día, antes de comer; en tintura, en extracto líquido y en ampollas (mezclado con hamamelis y meliloto).
- Precauciones: Se recomiendan tratamientos de hasta6 semanas para que resulte efectivo.
 
2- Avena, para los nervios
Las personas mayores pueden tener serios problemas para conciliar el sueño cuando llega la noche, sobre todo, aquellos que durante el día no llevan una vida especialmente activa. Los estados de ansiedad, irritabilidad e inquietud permanente son también frecuentes, y a veces suponen un motivo habitual de roce con las personas con las que conviven. Las espigas de avena se consideran un tranquilizante suave, muy adecuado para la vejez. Las semillas destacan además por su alto valor remineralizante y vitamínico, lo que las hace muy útiles para contribuir a la recuperación de personas debilitadas o convalecientes de una enfermedad reciente.
- Cómo se toma: En infusión o decocción, hasta tres tazas al día; en tintura, hasta 50 gotas, con zumo de frutas, y las semillas de avena en alimentación o en bebida preparada.
- Precauciones: Usada como diurético puede producir eventuales descompensaciones a personas hipertensas.  
 
3- Ajo, para los problemas cardiovasculares
Para prevenir el estancamiento sanguíneo en la forma de trombos y embolias, contamos con la ayuda de plantas, como el ajo Allium sativum L, que tienen la virtud de disminuir la viscosidad de la sangre, es decir, de hacerla más fluida, y de disolver las placas que se adhieren a las paredes de las arterias, como grasas, colesterol y coágulos, que acaban por entorpecer su paso. El ajo es por tanto un buen aliado para reducir los niveles de colesterol LDL y los triglicéridos, es además antihipertensivo e hipoglucemiante, lo que hace de él un apoyo para los diabéticos.
- Cómo tomarlo: Para quien no le agobie su sabor y el regusto que dejan, los expertos recomiendan tomar de 3 a 5 dientes de ajo crudos. Más aceptado será tomarlo en forma de perlas -unas 5-6 diarias-, cápsulas -3 g al día-, en tintura o extracto líquido -50 gotas en tres tomas-
- Precauciones: El aceite puro de ajo puede no ser bien tolerado por algunas personas.
 
4- Fresno para la artrosis
Con la edad, quien más quien menos acaba padeciendo de artrosis, un proceso degenerativo que desgasta el cartígalo entre las articulaciones. Afecta sobre todo a las rodillas, caderas, hombros y espalda, que es donde se localizar el dolor, un trastorno que algunos casos puede suponer un impedimento serio para desarrollar una vida normal. La fitoterapia nos ofrece muy diversas plantas para enfrentarnos a este problema, y una de ellas es el fresno Fraxinus excelsior L. Sus hojas presentan una clara acción diurética, depurativa y antiinflamatoria, y se consideran muy adecuadas para corregir los excesos de ácido úrico, que atacan las articulaciones, y la urea. Constituyen un remedio eficaz para combatir los dolores artrósicos y la gota.
- Cómo tomarlo: En infusión de las hojas, hasta 3 tazas diarias; en jarabe, extracto líquido y tintura, o bien en cremas y decocción para uso externo, aplicado en masaje o friegas sobre el área dolorida.
- Precauciones: Como cualquier diurético fuerte, su consumo debe estar bajo control en personas hipertensas o con cardiopatías.
 
5- Alfalfa para la osteoporosis
Con la osteoporosis, los huesos pierden densidad y se vuelven más frágiles y quebradizos, lo cual hace a las personas mayores, preferentemente a las mujeres, más vulnerables a sufrir fracturas o roturas. Una leguminosa muy común, la alfalfa Medicago sativa L, es muy rica en isoflavonas, en sales minerales, como calcio, hierro, fósforo y potasio, y en vitaminas C, D y K, lo que la convierte en un recurso herbario muy adecuado para calcificar los huesos, para consolidar las posibles fracturas y para frenar o cuanto menos aliviar la osteoporosis. Es una planta útil también para tratar las anemias, la debilidad, las convalecencias, la fatiga y la falta de energía.
- Cómo tomarla: En extracto líquido -unas 30 gotas en tres tomas diarias-, en cápsulas o comprimidos -2-3 diarias-, en infusión de la planta fresca o el jugo, o bien los germinados o las hojas tomadas crudas en ensalada.
- Precauciones: No hacer coincidir con tratamientos con estrógenos.
 
6- Hipérico para la depresión
Algunos mayores son muy vulnerables a la depresión. La pérdida de la pareja, los problemas familiares, los posibles impedimentos físicos, y lo que suele ser peor, las limitaciones de tipo psíquico, como la pérdida de memoria o la desorientación, provoca en muchos un desánimo progresivo, que puede desembocar en un proceso depresivo. Para depresiones en estadios iniciales o leves, una planta célebre, el hipérico Hypericum perforatum L, se revela como una opción válida, que cuenta además con el respaldo de la comunidad científica. La hipericina, y otros componentes activos del hipérico, actúan sobre los niveles de serotonina en el cerebro, evitando su exceso, y aumentando la sensación de bienestar en quien lo toma. Se indica igualmente en estados de ansiedad, para combatir los terrores nocturnos, las fobias y la hiperactividad.
-Cómo se toma: En extracto fluido -unos 300 mg diarios-, en tintura - 50 gotas en tres dosis diarias- y la infusión -mezclado con melisa y espino albar- dos tazas diarias, en ayunas.
- Precauciones: No se debe tomar hipérico si se están siguiendo tratamientos antidepresivos con medicamentos.
 
7- Otras plantas útiles:
-- Sauce blanco, para las lumbalgias y las jaquecas, en decocción o cápsulas.
-- Arándanos, para la incontinencia, en decocción de las bayas.
-- Romero, como estimulante general, para la pérdida de vitalidad, tomado en infusión, tintura, extracto líquidos o cápsulas.
-- Hojas de olivo, para la tensión alta, en gotas de extracto líquido.
-- Shiitake y reishi, como antioxidantes, para neutralizar la acción de los radicales libres, en extracto o polvos.
-- Equinácea, para los resfriados frecuentes, como preventivo, tomado en tintura o cápsulas.
-- Milenrama, para el trigémino o dolor facial, en compresas frías.
-- Genciana, para estimular la digestión, en decocción con melisa y anís estrellado.
-- Tila, melisa u otros tranquilizantes, para la tensión nerviosa, en infusión.
-- Linaza, para el estreñimiento, en polvos o maceración.
 
 
 
 
 
PLANTAS PARA EL ÁNIMO (tonificantes)
 
Estar de buen humor no es un asunto fácil, y a la vista de la vida frenética que llevamos y de la penosa situación del mundo, muchas veces, ciertamente, se nos presenta como un propósito casi quimérico. Pero sentirnos estimulados, con ánimos suficientes para afrontar los compromisos del día a día o para encarar los desafíos que nos planteamos, sean en el plano laboral, social o íntimo, es una necesidad irrenunciable. Para muchos resulta muy difícil ponerse en marcha tras unos días de vacaciones o simplemente del fin de semana. Hay quien no concibe empezar el día sin una buena taza de café bien cargado, al que le sucederán algunas tazas más a lo largo de la jornada. Los hay también que optan por "ayudas" más contundentes, porque hasta en el ocio nos sentimos obligados a mostrarnos locuaces y espléndidos. Pero es posible ganar unas buenas décimas de buen humor y optimismo vital sin necesidad de recurrir a pastillas o al alcohol, es la via que nos ofrecen determinadas plantas medicinales, como las que hemos seleccionado para este apartado. La mayoría son plantas estimulantes del sistema nervioso central, que contribuyen a insuflarnos un poco de euforia, pero las hay también tonificantes y vigorizantes, que nos ayudarán a doblegar la fatiga y a recobrar las ganas de actividad. Las hay que son defatigantes, que supondrán un apoyo muy válido para vencer el agotamiento tras un esfuerzo deportivo o el emprendido tras una ruta montañera. Son, sin embargo, plantas que deben tomarse con moderación, nunca en las horas próximas al momento de acostarnos, para evitar que suframos de insomnio, asi como en situaciones de tensión nerviosa o irritabilidad acusada.
 
1- Guaraná, para ganar elocuencia
Originario de la cuenca del Amazonas y de áreas limítrofes, el guaraná Paullinia cupana H.B.K. se encuentra de forma natural en las selvas húmedas, pero se planta en toda Sudamérica. Sus supuestas propiedades milagrosas eran ya conocidas por los pobladores indígenas, que arriesgaban sus vidas, trepando hasta la copa de árboles de hasta 60 metros de alto, para poder recoger los frutos de esta liana. Hoy día, muchos pueblos nativos de la Amazonia siguen preparando con la semillas del guaraná, mezcladas con harina de mamioca, una pasta que llaman la pastaguaraná, asi como una bebida refrescante y estimulante. Las semillas del guaraná tienen un efecto excitante que supera en mucho al que proporciona una taza de café bien cargada.
Principios activos: Teína, teofilina y teobromina, taninos catéquicos, guaranina, colina.
Propiedades: Estimulante del sistema nervioso central, tónico digestivo, astringente, antidiarreico, antiagregante plaquetario, ligeramente afrodisiaco.
A quien conviene: Es un remedio que se ha indicado, con moderación, a quienes deban lucirse, mostrándose brillantes y despejados, ante audiencias exigentes, o como apoyo para mantener la concentración en tareas intelectuales. El guaraná ayuda además a superar la desgana, la falta de motivación o la inhibición y a consolidar el autocontrol. Reduce el cansancio y contribuye a mitigar la jaqueca nerviosa. Se recomienda igualmente en caso de agotamiento e hipotensión. Muchos lo consideran afrodisiaco. Es también un tónico digestivo, indicado para aliviar gastroenteritis y atajar diarreas. Previene el estancamiento de la sangre y reduce el riesgo coronario. Los polvos de guaraná se han integrado en tratamientos dietéticos para adelgazar.
Precauciones: Debe ser evitado en caso de ansiedad, hipertensión, taquicardias, insomnio, gastritis y colon irritable, y se ha de evitar consumirlo por la noche.
Formas de presentación: Semillas para tomar crudas o en polvos, la decocción o infusión, en tintura, jarabe, perlas con extracto fluido, cápsulas y comprimidos.
Remedio recomendado: Una cápsula (100 mg) al día, o bien una pizca de polvos de guaraná mezclado en el yogur de la mañana.
 
2- Ginseng, un impulso de energía contra a fatiga
Originario del noreste de China, este de Rusia y Corea, el ginseng coreano Panax ginseng C.A. Meyer es sin duda la planta china más popular en Occidente, circunstancia motivada por la fama de afrodisiaca que le acompaña y que en cierto punto es exagerada. Se cosechan las raices principales de ejemplares de cinco o más años, en otoño. En la medicina tradicional china, el ginseng se conoce como estimulante, indicado para trabajadores, expedicionarios y atletas sometidos a estrés físico y fatiga extenuante.
Principios activos: Saponinas triterpénicas, ginsenósidos, fitosteroles, fitoestrógenos, aceite esencial con limoneno y citral, vitaminas y sales minerales.
Propiedades: Estimulante del sistema nervioso central, adaptógeno, tónico, hipoglucemiante, hipolipemiante, antianémico, tónico cardíaco, ligeramente afrodisiaco.
A quien conviene: Es un estimulante nervioso muy eficaz, que nos ayuda a enfrentarnos a las dificultades y a superar los estados de estrés, tensión, fatiga y angustia. Repone las fuerzas tras una situación de bajón emocional o físico y devuelve el vigor y las ganas de lucha tras haber pasado por una enfermedad. Nos ayuda a mantener la concentración y a fortalecer la memoria, o cuanto menos, a frenar su pérdida. Ejerce una acción beneficiosa sobre el metabolismo, mejora la tolerancia a la glucosa, y por ello puede ser útil como complemento a los tratamientos antidiabéticos, extremo éste en el que se debe contar siempre con asesoramiento médico. Por su contenido en fitoestrógenos, el ginseng se ha considerado afrodisiaco. Favorece la excitación de los órganos sexuales femeninos y la frecuencia en la erección en el hombre.  
Precauciones: Debe ser evitado en caso de arritmias, taquicardias, hipertensión arterial, insomnio, irritabilidad nerviosa, hiperestrogenia. No simultanear con la toma de otros excitantes como café, cola o té. Evitar tratamientos prolongados.
Formas de presentación: Raíz fresca o seca para decocción, en polvos, extracto líquido, tintura y cápsulas.
Remedio recomendado: Como fórmula estimulante, en caso de fatiga psico-física, podemos añadir 1 g de ginseng en polvos a la sopa, o bien tomarlo en cápsulas, 200 mg diarios como máximo, preferentemente por las mañanas.
 
3- Damiana, enemiga de la fatiga  
Planta originaria del golfo de México y las islas del Caribe, la damiana Turnera diffusa Wild. ha cobrado una cierta celebridad por su aureola de afrodisiaca. Se cosechan las hojas de ésta y otras especies afines, que además de como tonificantes, se emplean para dar aroma y sabor a licores tradicionales.
Partes utilizadas: Las hojas
Principios activos: Betasitosterol, damianina, taninos, aceite esencial con timol, cineol y pinenos, glicósidos cianogénicos, resinas.
Propiedades: Estimulante del sistema nervioso central, antidepresiva, diurética, antiséptica, expectorante, aperitiva, digestiva, afrodisiaca.
A quien conviene: Las hojas de la damiana se toman como un té energético en muchos lugares de México. Es una hierba tonificante, que ayuda a superar los estados de fatiga física y psíquica, la astenia, la apatía, la falta de motivaciones y la debilidad. Contribuye a aumentar el buen humor y la autoestima. Por sus efectos estimulantes, se recomienda también a personas que estén atravesando un periodo de melancolía o de depresión leve o incipiente, y como un apoyo contra el estrés. La damiana actúa como un diurético fuerte y un antiséptico urinario, muy útil para tratar infecciones como la cistitis. Se ha considerado tradicionalmente un tónico útil para corregir las disfunciones eréctiles en el hombre y para devolver el apetito sexual. El análisis farmacológico de los alcaloides que contiene sugiere que puede mostrar una acción similar al de la testosterona en el varón. Como estimulante nervioso, ejerce una acción moderadamente euforizante, que puede ayudar a mejorar las relaciones sexuales y a perder la timidez o la inhibición, pero su validez como afrodisiaca no viene sustentada por argumentos científicos.
Precauciones: Se debe evitar durante el embarazo y la lactancia, y en caso de ansiedad, taquicardias e irritabilidad nerviosa.
Formas de presentación: En tintura alcohólica, hasta 50 gotas en dos tomas diarias diarias como máximo; en extracto líquido, cápsulas y la infusión de la planta fresca o seca, de una a tres tazas al día, siempre alejadas del momento de acostarse.
Remedio recomendado: Infusión estimulante de hojas de damiana, romero y menta. Una cucharada sopera rasa de la mezcla por vaso de agua. Hervir 1-2 minutos, dejar en reposo 10 minutos más y colar. Se puede añadir una cucharadita de miel de romero. Tomar una o dos tazas al día, por la mañana y a medio día.
 
4- Espino amarillo, regalo de vitaminas
El espino amarillo Hippophaë rhamnoides L. es un arbusto que crece cerca de cursos fluviales y de las costas, y a pesar de que está muy extendido por Europa, en nuestro pais es muy escaso y su presencia se reduce a contados reductos en el Pirineo aragonés.  Existe una arraigada tradición de recolectar sus bayas para elaborar zumos y compotas, y en el Tibet y otras áreas del Himalaya, estas bayas han sido muy apreciadas por sus aplicaciones medicinales. Constituyen uno de los principales componentes de un remedio tradicional tibetano para fortalecer el organismo, conocido por D'har Bu.  
Principios activos: Vitamina C, betacarotenos, vitamina E, flavonoides, ácidos grasos insaturados como el ácido oleico, mucílagos, taninos.
Propiedades: Vitamínico, energético, reconstituyente, digestivo, astringente, hipocolesterolemiante, tónico cardiaco.
A quien conviene: Las bayas del espino amarillo tienen más concentración de vitamina C que el limón o la naranja. Se ha calculado que un kilo de estos frutos contienen hasta 5 g de esta vitamina. Se revela, por tanto, como un remedio excelente para personas debilitadas, anémicas, convalecientes o sometidas a situaciones de estrés y fatiga persistentes. Su consumo aumenta la resistencia a las infecciones, y se indica para prevenir la gripe y las alergias respiratorias. Como bálsamo digestivo, alivia las gastroenteritis y las diarreas. Al espino amarillo se le atribuye una cierta capacidad como estimulante de la circulación sanguínea y como reductor de los niveles de grasa y colesterol en sangre. Está señalado como apoyo herbario en desórdenes cardíacos y como un preventivo de la arteriosclerosis. Asi mismo, se están realizado estudios en laboratorio para demostrar su posible eficacia en el tratamiento de determinados tipos de cáncer.
Precauciones: Por sus efectos astringentes, se recomiendan tratamientos breves y discontinuos.
Formas de presentación: Bayas frescas, en zumo, bayas secas para decocción o maceración, jarabe, tintura, extracto líquido y aceite para uso externo.
Remedio recomendado: Tisana para la astenia, que preparamos manteniendo unos 6 a 8 frutos en maceración toda la noche, colando al día siguiente y dulcificando, si se quiere, con una pizca de azúcar. Se trata de tomar a lo largo del día, a pequeñas dosis.
 
5- Schisandra, estimulante y antiestrés
La schisandra Schisandra chinensis o "Wu Wei Zi", “planta de los cinco sabores” por la sucesión de gustos que produce en el paladar al tomarla, que coinciden con los cinco vectores de energía elementales, agrio, dulce, salado, cálido y fresco, es un elemento básico en la medicina tradicional china. Su alto rendimiento como planta tónica y estimulante ha hecho que cada vez sea más frecuente encontrarla en los herbolarios de Occidente. El fruto se cosecha en otoño, cuando ha alcanzado la plena madurez.
Principios activos: Aceite esencial fitosteroles, schizandrina, vitaminas B y C
Propiedades: Tónica, estimulante, adaptógena, inmunoestimulante, hepatoprotectora, ligeramente afrodisiaca.
A quien conviene: Destaca como un tónico Qi que actúa como agente reparador sobre el corazón, el hígado y los riñones. Pero además, la schisandra está considerada una prodigiosa planta tónica y estimulante. Combate el estrés, el insomnio, la irritabilidad nerviosa y la fatiga, aumentando la respuesta refleja a los estímulos exteriores. Las bayas de la schisandra contribuyen a mejorar la agilidad mental, a facilitar la retención de datos y conocimientos y a afianzar la seguridad personal y el autocontrol. Favorece la secreción de los fluidos sexuales en el hombre y en la mujer, y se dice que mejora la respuesta a los estímulos sexuales. La schisandra también se indica contra las afecciones respiratorias, con tos y dificultades para respirar, contra desórdenes digestivos, con diarrea, e incluso como un remedio natural para mejorar la vista.
Precauciones: Reducir su consumo en caso de ansiedad, irritabilidad nerviosa y taquicardias.
Formas de presentación: Las bayas secas para tomar crudas o en decocción, y la tintura alcohólica.
Remedio recomendado: Como fórmula estimulante, la decocción de 5 gramos de bayas de schisandra -que habremos mantenido en maceración toda la noche- por 1/4 de litro de agua. Se deja reposar diez minutos y se toma una dosis diaria. La tradición marca que se ha de prolongar el consumo durante cien días para apreciar sus efectos.
 
6- Yerba mate, para enterrar la astenia
Los guaranís lo conocían por "caiguá", que significa "lo que es de la hierba", y mati es el nombre en quechua que corresponde a calabaza. Y mate es el nombre que por defecto ha quedado de esta infusión, tan apreciada en Argentina y Uruguay, que se debe sorber utilizando una calabacita y una cañita o "bombilla", que se va pasando de mano en mano en completa complicidad. Es un ritual de hospitalidad y amistad muy arraigado en estos paises, pero que ya ha trascendido sus fronteras. Del mate Ilex paraguariensis St. Hill, arbusto emparentado con nuestro acebo, se cosechan sus hojas.
Principios activos: Taninos catéquicos, cafeína, teofilina, lactonas.
Propiedades: Estimulante del sistema nervioso central, antiasténico, defatigante, diurético.
A quien conviene: La yerba mate es un prodigioso antídoto a la fatiga y al estrés, nos ayuda a vencer la desgana y la astenia, y prepara al organismo para la actividad. Recientemente se ha incluido también en preparados dietéticos para perder peso.
Precauciones: Evitar en caso de ansiedad, irritabilidad, insomnio o taquicardias.
Formas de presentación: Hoja seca para infusión, polvos, tintura.
Remedio recomendado: Mate frío o tereré, en infusión, tomado a la manera tradicional.
 
7- Eleuterococo, para aumentar el rendimiento físico
El ginseng siberiano o eleuterococo Eleutecoccus senticosus Maxim. es otra de las aportaciones estrella de la fitoterapia oriental. Emparentada con la hiedra, constituye uno de los remedios más recomendados en los herbolarios para luchar contra la fatiga psico-física, la astenia y los estados de debilidad. Se cosecha la raíz, que se arranca en el otoño.
Principios activos: Eleuterósidos, distintos heterósidos, cumarinas, saponinas triterpénicas, polisacáridos, azúcares.
Propiedades: Adaptógeno, antiestrés, tónico, estimulante, antidepresivo, antiinflamatorio, vasoprotector, defatigante.
A quien conviene: Ayuda al organismo a reponerse de las situaciones de sobreesfuerzo, incrementa la resistencia física y la capacidad de adaptación a los rigores del clima. Refuerza nuestras defensas contra el ataque de virus y bacterias, y contribuye por tanto a acelerar la recuperación tras una larga enfermedad. Contribuye a aumentar el rendimiento intelectual y la capacidad de concentración. Es muy útil por todo ello para estudiantes, opositores, expedicionarios y deportistas de élite en pruebas de resistencia. Es un excelente remedio para comatir el estrés y los estados depresivos leves o incipientes. Se le atribuye un efecto estimulante sobre las glándulas sexuales y por ello se ha indicado para tratar la impotencia.
Precauciones: Evitar en caso de tensión alta, hiperestrogenismo, ansiedad y taquicardia.
Formas de presentación: En tintura, hasta 50 gotas al día, con el zumo de frutas; en extracto líquido, en polvos y en cápsulas y comprimidos.
Remedio recomendado: Una decocción, que prepararemos combinando una cucharada sopera de raíz de eleuterococo y anís estrellado por 1/4 de litro de agua. Hervimos la mezcla durante diez minutos, a fuego lento. La dejamos reposar, tapada, durante toda la noche, para que mantenga intacto el potencial de sus minerales y al día siguiente, colamos y bebemos, en ayunas, una vez al día, por las mañanas.
 
8- Otras plantas útiles
-- Té verde con menta, en infusión
-- Romero, en infusión
-- Ajedrea, en infusión, tintura o extracto líquido
-- Canela, en rama, en infusión combinada, en tintura y en polvos.
-- Rosal silvestre, bayas crudas, en zumo, en decocción
-- Nuez de cola, en cápsulas y extracto líquido
 
9- Aromaterapia
-- Aceites esenciales de canela, citronela, palmarrosa, cardamomo, jazmín, nuez moscada y jengibre, en baños o masajes.
 
 
PLANTAS PARA LA DIGESTIÓN
 
Todos estamos expuestos, en un momento u otro, a los trastornos digestivos, que pueden ser muy diversos. Digestiones lentas o pesadas, alimentos que nos sientan mal por una reacción alérgica o simplemente porque estaban pasados, y nos provocan náuseas o diarreas, un exceso de acidez gástrica, infecciones gastrointestinales, la aparición de espasmos gástricos, o la dificultad de evacuar por estreñimientos puntuales o crónicos son algunas de las dolencias más frecuentes. El estrés, el exceso de prisas y la ansiedad pueden complicar la situación o hacer que estos trastornos acaben siendo más recurrentes. La forma de comer, aceleradamente y sin las debidas pausas, y determinados alimentos, como las legumbres o las bebidas gaseosas, pueden provocar acumulación de gases, hipo o flatulencias. Contamos con un amplio espectro de plantas con efectos digestivos y carminativos que nos alivian estos problemas. Las hay antidiarreicas, que nos socorren en caso de colitis y diarreas puntuales, las hay antiepasmódicas que nos calman los espasmos gastrointestinales, laxantes, que nos ayudarán a ir de vientre, o bien hepatoprotectoras y colagogas, que corregirán las alteraciones hepáticas, estimularán la secreción de bilis o evitarán la formación de cálculos en la vesícula  Meteorismos, mal aliento, náuseas, mareos y malestar general son otras manifestaciones de dolencia digestiva que pueden ser perfectamente tratadas con plantas medicinales, como las siete que hemos seleccionado en este apartado. La función de estas plantas es la de mejorar el funcionamiento de los órganos digestivos y devolvernos las ganas de comer y el bienestar perdido.
 
1- Genciana, para recobrar la gana
En verano, los prados de muchas montañas europeas, entre ellas los Pirineos y los Picos de Europa, se enaltecen con la presencia de unas de las plantas más bellas y elegantes, las gencianas amarillas Gentiana lutea L. El tesoro medicinal de la genciana, sin embago, se oculta bajo tierra, en una raíz de grandes proporciones, cuya cosecha debe quedar reservada sólo a expertos. La recolección debe hacerse en otoño, antes de las primeras nieves, y por ser tan grande y estar tan enraizada, resulta una operación muy ardua y dura.
Principios activos: Principios amargos (genciopicrina), xantonas (genciósido), inulina, pectina, fitosteroles, azúcares, ácidos fenólicos, aceite esencial.
Propiedades: Estimulante de la digestión, amarga, digestiva, colerética, antiinflamatoria, estomática, estimulante inmunitario, cicatrizante.
A quien conviene: El sabor muy amargo de esta raíz estimula la salivación y las secreciones gástricas y biliares. Es un legendario remedio de herbolario para abrir el apetito, especialmente en personas debilitadas o convalecientes de una enfermedad reciente. Tonifica las funciones del hígado y la vesícula después de un episodio de trastorno digestivo, un empache o una intoxicación alimentaria. Tomada tras las comidas, favorece la absorción de los nutrientes y permite disfrutar de una digestión cómoda y agradable. La genciana, por otro lado, se indica para fortalecer las defensas orgánicas y evitar contraer la gripe u otras infecciones respiratorias.
Precauciones:  Por su carácter muy amargo, no debe tomarse durante la lactancia para no amargar la leche materna. Se desaconseja igualmente en caso de gastritis, úlceras gastroduodenales y durante el embarazo.
Formas de presentación: En decocción, combinada con otras plantas que mejoren su sabor (hasta tres tazas al día), en tintura, extracto líquido, maceración de la planta fresca, cápsulas y comprimidos.
Nuestro remedio: Para digestiones lentas o pesadas, falta de apetito, meteorismos y acidez estomacal, la combinación de 2-3 g de las tinturas de genciana, palo de canela, hinojo y naranja amarga. Tomar unos 5 ml en tres tomas diarias, antes de las comidas principales.
 
2- Salicaria, una barrera para las diarreas  
Durante el verano, las orillas de ríos, canales y acequias, asi como los pastizales de casi toda la península se adornan de vistosas espigas rosadas, es la explosión de las salicarias Lythrum salicaria L, una bella planta asociada a los cursos de agua, que por ello, en muchos puntos del país, se la conoce también por arroyuela. La salicaria ya era bien conocida en la época de Dioscórides, que la recomendaba contra la disentería, y se cuenta que era norma en los ejércitos europeos del siglo XVII y XVIII proveerse de reservas de esta planta para combatir esta misma enfermedad, que tantos estragos causaba en la tropa y la marinería. Con fines medicinales se cosechan las sumidades floridas.
Principios activos: Taninos gálicos, flavonoides (vitexina), antocianósidos, glicósidos (salicarina), aceite esencial, mucílagos.
Propiedades: Astringente, antidiarreica, antihemorrágica, demulcente, antiséptica, hipoglucemiante, cicatrizante.
A quien conviene: Es una planta ideal para atajar diarreas, sean nerviosas o por indisposición gastrointestinal, como las provocadas por cambios de agua, las diarreas víricas, o bien por colitis o intoxicaciones alimentarias leves, y las derivadas del síndrome del colon irritable. Por ser un buen aporte de hierro, la infusión simple de salicaria, o bien combinada con berro o alfalfa, se indica como apoyo para tratar estados de anemia, debilidad y falta de energía. Y es una aliada de la mujer joven, para aliviar la tensión premenstrual y frenar el sangrado menstrual excesivo. A nivel externo se usa sobre heridas  con sangrado leve, sobre eccemas, forúnculos y en sangrados bucales, asi como para cortar las infecciones oculares.
Precauciones: Por su alto contenido en taninos, podría resultar irritante para muchas personas, por ello se aconseja asociarla a plantas demulcentes como la malva o el llantén.
Formas de presentación: En infusión combinada (2-3 tazas diarias), en tintura, extracto líquido y cápsulas.
Nuestro remedio: Para acabar con la diarrea, combinamos salicaria con los frutos del rosal silvestre o escaramujos -previamente deshuesados-, más pasiflora y un corrector de sabor, el anís estrellado. A partes iguales, una cucharada sopera rasa por vaso de agua. Se hierve un par de minutos, se deja reposar otros 10 y se cuela. Se pueden tomar dos o tres vasos al día, en función de la intensidad del episodio diarreico, mientras dure.
 
3- Laurel, contra el malestar estomacal
Originario de Europa Oriental, norte de África y Asia menor, pero plantado en toda la Europa mediterránea, el laurel Laurus nobilis L. es símbolo de éxito y de fortuna. En la antigua Grecia, se utilizaban sus hojas en las ofrendas adivinatorias del oráculo de Delfos y en la antigua Roma, era costumbre adornar con ellas las testas de los gladiadores y atletas victoriosos. Se han considerado que dan suerte y protección a quien las exhibe. Las hojas de laurel se emplean además para aromar guisos y sopas.  
Principios activos: Aceite esencial con cineol, eugenol y lactonas sesquiterpénicas. Ácidos grasos insaturados en los frutos (oléico, láurico), taninos, mucílagos, resinas.
Propiedades: Estimulante digestivo, carminativo, estomacal, antiespasmódico, colagogo, antiséptico, expectorante.
A quien conviene: Personas afectadas de estrés, de nervios o preocupaciones, que rara vez les tienta sentarse a la mesa para comer y lo acaban haciendo de mala gana, las hojas del laurel, tan utilizadas como condimento, resultan ideales para abrir el apetito. Combaten el malestar general, los espasmos gastrointestinales, los gases, el mal aliento y mal sabor de boca y los meteorismos. Ricos en esencia, hojas y frutos del laurel se indican también para cortar las infecciones respiratorias, en gripe, bronquitis y procesos asmáticos leves.
Precauciones: No se debe tomar el aceite esencial por vía oral, menos que nunca en el embarazo y la lactancia.
Formas de presentación: Infusión de las hojas (2-3 tazas al día), tintura, decocción para colutorios, gargarismos e inhalaciones en caso de congestión respiratoria. El aceite esencial en aromaterapia (baños y masajes para dolores reumáticos).
Nuestro remedio: Para evitar la pesadez estomacal, preparamos una infusión de hojas de laurel, poleo blanco y jengibre rallado, una cucharada sopera de la mezcla por vaso de agua. Hervimos 2-3 minutos, dejamos que repose, tapado, y colamos. Lo tomamos antes de las comidas como estimulante digestivo, y después en caso de indisposición.
 
4- Lino para el estreñimiento
Originario de la Europa mediterránea y el norte de África, el lino Linum usitatissimum L. se ha plantado a escala industrial, para la obtención de fibra, y sus semillas, para la elaboración de harinas de linaza y aceite. Las semillas se cosechan al final del verano o principios del otoño.
Principios activos: Mucílagos, ácidos grasos insaturados (oléico, linoléico, linolénico), heterósidos cianogénicos (linamarina), fitosteroles, proteinas.
Propiedades: Laxante, demulcente, hipolipemiante, hipoglucemiante ligero, saciante, antiséptico.
A quién conviene: A quien padezca de forma recurrente o puntual estados de estreñimiento, en estreñimientos relacionados con el estrés, con cambios hormonales o por cambios en la alimentación. Las semillas de lino calman la irritación de las mucosas del tracto digestivo, contribuyen, por la presencia de mucílagos, a que se forme una masa gelatinosa, que ayuda a evacuar sin problemas. Se ha indicado también en caso de gastritis y en tratamientos de apoyo para perder peso por su efecto saciante. El aceite de lino se recomienda para prevenir la acumulación de materias grasas en las paredes de las arterias en hiperlipidemias y hipercolesterolemias.
Precauciones: Evitar en caso de estenosis esofágica. La harina de lino se recomienda sólo para aplicaciones externas.
Formas de presentación: Las semillas en maceraciones, el aceite de lino (3 cucharadas diarias) y la decocción de las semillas  y la harina para usos externos.
Nuestro remedio: Para el estreñimiento, dejamos a macerar toda la noche 3 cucharadas soperas de semillas de lino, más raíz de malvavisco y un puñado de llantén mayor. Al día siguiente, colamos bien, y tomamos unas dos veces al día, en ayunas, la última poco antes de acostarnos, acompañando de mucha agua.
 
5- Té de roca, para la acidez estomacal
El té de roca o té de Aragón Jasonia saxatilis (Lamk.) Guss. aparece en roquedos y peñas de origen calcáreo, barrancos y desfiladeros de las montañas del litoral mediterráneo, de Andalucía a la Provenza, más el valle del Ebro. Se suele recolectar justo antes de que se abran las cabezuelas florales, y hay que evitar arrancarlas de cuajo, porque no es una planta abundante.
Principios activos: Principios amargos, lactonas sesquiterpénicas, heterósidos, taninos.
Propiedades: Tónico digestivo, aperitivo, carminativo, antiespasmódico, antidiarreico, laxante, antiséptico, hipotensor, antiinflamatorio.
A quién conviene: Como planta tradicional, considerada toda una panacea en muchos puntos del país, el té de roca no podía faltar en esta selección, a pesar de que, sin embargo, no ha estado muy estudiado. Se considera un excelente bálsamo digestivo, que alivia la acidez estomacal, los espasmos gastrointestinales y puede atajar las diarreas. Evita también la formación de gases, los meteorismos y las flatulencias, asi como el mal aliento. En ayunas, en cambio, se ha considerado laxante. Se ha indicado para controlar la tensión sanguínea y para aliviar resfriados y procesos gripales.
Precauciones: Evitar durante el embarazo. Dosis elevadas pueden resultar vomitivas.
Formas de presentación: En infusión simple o combinada (3 tazas diarias, antes o después de las comidas), la infusión en uso tópico para aplicar en compresas, friegas o masajes.
Nuestro remedio: Para evitar los espasmos intestinales y las flatulencias, podemos probar la fórmula que combina té de roca con ajedrea blanca Satureja fruticosa, hierbaluisa y melisa a partes iguales. Se hierve el agua, se echan las hierbas previamente mezcladas, y se mantiene 10 minutos en infusión. Tomar hasta 3 tazas al día, tras las comidas principales.
 
6- Marrubio negro, para combatir las náuseas
Presente y común en toda Europa, el marrubio negro Ballota nigra L. aparece en herbazales ruderales y márgenes de setos y bosques, junto a ortigas y acederas. Se puede encontrar florido durante toda la primavera y el verano, y se cosechan de él las sumidades floridas.
Principios activos: Aceite esencial, lactonas triterpénicas (ballotinona), flavonoides, colina.
Propiedades: Digestivo, estomacal, antiemético, antiespasmódico, antiinflamatorio, sedante ligero, diurético, hipotensor.
A quien conviene: Es una planta de usos tradicionales muy arraigados, que se ha destinado a combatir las náuseas y los vómitos, por ejemplo en el caso de mujeres en cinta. Actúa como corrector digestivo y estomacal, muy eficaz para aliviar la acidez, la hinchazón abdominal y los espasmos gastrointestinales. se ha usado también como un sedante suave, para aplacar los estados nerviosos, que muchas veces están en el origen de las alteraciones digestivas. Se ha recomendado igualmente para bajar la tensión arterial.
Precauciones: No se debe tomar el aceite esencial por vía oral en el embarazo, la lactancia, ni administrar a niños menores de 6 años, y a personas afectadas de gastritis y úlceras gastroduodenales.
Formas de presentación: En infusión simple o combinada (hasta 3-4 tazas al día), en tintura alcohólica.
Nuestro remedio: Para las náuseas y para evitar los vómitos, mezclamos las tinturas de marrubio negro, melisa, manzanilla y jengibre, unas 4-5 gotas de cada, que disolvemos en un vaso grande agua. Bebemos a pequeños sorbos, en el momento en que se presentan las náuseas. Otra opción es la infusión de marrubio y menta.
 
7- Agracejo, para tonificar la vesícula  
Orginaria de Europa, el agracejo Berberis vulgaris L. está presente de forma dispersa en las montañas españolas, en diferentes variedades o subespecies. Se cosechan las hojas y los frutos en verano y la corteza de la raíz en otoño. Con los frutos se elabora un zumo refrescante.
Principios activos: Alcaloides (berberina y berbamina), ácidos cítrico, tartárico y málico en los frutos.
Propiedades: Digestivo, aperitivo, tónico amargo, colerético, colagogo, antimicrobiano, febrífugo, antiespasmódico, laxante (frutos).
A quien conviene: Es un excelente aliado para las personas que tengan problemas de vesícula, para evitar la formación de cálculos biliares y para favorecer su eliminación, para el tratamiento de la ictericia y el hígado graso. Los remedios con raiz de agracejo son muy eficaces para tonificar las funciones del aparato digestivo, para aliviar la acidez, los espasmos gastrointestinales y las digestiones pesadas y lentas. Contribuyen a aumentar el apetito y combaten las infecciones microbianas que se producen en el tracto digestivo. Los frutos, de sabor muy agridulce, se dejan fermentar y se toman en jarabe o como bebida refrescante, muy adecuada en caso de estreñimiento puntual.
Precauciones: Por la presencia de alcaloides activos, el agracejo debe ser utilizado con cautela. Está por completo contraindicado a mujeres embarazadas o que piensen estarlo pronto, a causa de su efecto oxitócico, asi como a pacientes con obstrucción de las vías biliares. Se aconsejan tratamientos breves y discontinuos.
Formas de presentación: En decocción de la raíz y en polvos, infusión de las hojas y los frutos, tintura, extracto líquido, zumo de los frutos, jarabe y en cápsulas.
Nuestro remedio: Fórmula para trastornos hepatobiliares, cálculos biliares, ictericia. Combinamos 20 g de raíz de agracejo, hojas de boldo, diente de león, semillas de hinojo y corteza de naranjo amargo. Una cucharada sopera por taza. Hervimos 2-3 minutos, dejamos en reposo y colamos. Tomamos 2-3 tazas al día, tras las comidas principales, endulzadas con miel de tomillo.
 
8- Otras plantas útiles:
-- Tónicos digestivos: jengibre, manzanilla, tomillo, rabo de gato, clinopodio, condurango
-- Aperitivas: centaura menor, nogal, achicoria, cúrcuma, guaraná, piña
-- Carminativas: hinojo, alcaravea, cilantro, anís, hierbaluisa
-- Antidiarreicas. agrimonia, olmo rojo, hierba de san roberto, cariofilada, roble, encina
-- Laxantes: malvavisco, frángula, sen, zaragatona, llantén
-- Tónicos hepáticos: cardo mariano, crisantelo, boldo, diente de león, alcachofera
 
9- Aromaterapia:
-- Aceites esenciales con efectos estimulantes de la digestión: jengibre, canela, menta, citronela, cardamomo, pimienta negra.
-- Aceites esenciales con efectos depurativos (carminativos, laxantes): alcaravea, hinojo, perejil, bergamota, zanahoria, apio, nerolí, mandarina, lima, pomelo, palmarrosa
 
 
 
 
PLANTAS PARA RESFRIADOS Y GRIPE
 
 Hay quien se resfría cada dos por tres y quien, en cambio, lo está raramente, pero nadie se escapa de estarlo alguna vez. Los cambios de temperatura, tan bruscos en la ciudad a causa del dominio abusivo de los aires acondicionados en domicilios, oficinas y transportes, son caldo de cultivo para los catarros y también para las infecciones respiratorias, que se propagan con mayor facilidad. Pasar de ambientes artificiales y excesivamente caldeados o refrigerados, a la temperatura exterior, supone un golpe pernicioso para nuestra salud, y nos aleja del ritmo natural de las estaciones, al que el cuerpo está adaptado. La incidencia del estrés y determinados hábitos alimenticios, merman nuestra capacidad de autodefensa contra el ataque de agentes patógenos, y nos hacen más proclives a padecer infecciones. Procesos gripales, que cursan con tos y congestión, pero también con fiebre más o menos alta, dolores agudos de barriga y diarreas, anginas con pus, que afectan preferentemente a los más pequeños, laringitis y faringitis, con episodios de afonía o incluso de pérdida de voz, irritación de garganta y bronquitis, acuciada a veces por el hábito de fumar o por estar expuestos a aires insanos, son algunas de las dolencias respiratorias más extendidas. En muchos casos, el uso de plantas medicinales se impone como una alternativa segura, y por regla general, de efectos más duraderos, que el proporcionado por los fármacos. Son plantas con propiedades balsámicas, para eliminar la congestión, mucolíticas, sudoríficas, febrífugas o antisépticas, capaces pues de reducir las décimas de fiebre. Se trata de proveerse de un buen remanente de plantas en casa para enfrentarse a este tipo de dolencias respiratorias al primer síntoma. En este apartado hemos seleccionado siete de las más eficaces, de entre un espectro ciertamente amplio de posibilidades.
 
1- Tomillo, para la gripe
Pocas plantas representan mejor el paisaje agreste y atormentado del Mediterráneo Occidental, con sus sequías pertinaces y sus tormentas súbitas y destructoras, que esta aromática mata, el tomillo Thymus vulgaris L. Es una planta muy enraizada a la cultura popular, que le atribuye un sinfín de virtudes, y es una de las estrellas en cualquier herbolario español. Con fines medicinales se cosechan las sumidades en flor, en plena primavera.
Principios activos: Aceite esencial con timol, carvacrol y geraniol, ácidos fenólicos (rosmarínico y cafeíco), flavonoides, taninos.
Propiedades: Antiséptico, expectorante, diurético, tónico, antiespasmódico, carminativo, colerético, vermífugo.
A quien conviene: Es una planta de gran tradición y de múltiples usos terapéuticos, que cuenta con una especial veneración por parte de los herbolarios de nuestro país. Destaca su efecto antiséptico y expectorante sobre las vías respiratorias, que inhibe el desarrollo de las infecciones y contribuye a suavizar la irritación de garganta, a disminuir la congestión pulmonar y a reblandecer la tos. Los remedios con tomillo serán de gran utilidad para tratar los catarros, la gripe, la rinitis alérgica, con estornudos frecuentes y mucha mucosidad, conjuntivitis, sinusitis, traqueitis, faringitis, laringitis y bronquitis. Se ha indicado en procesos asmáticos leves, para favorecer la respiración. Alivia los espasmos musculares, asociados a veces a estados gripales, y la sensación de trancazo, y combate la debilidad y la astenia. El tomillo es también un excelente tónico digestivo y un antiséptico urinario.
Precauciones: Se desaconseja el uso del aceite esencial por vía oral, muy especialmente durante el embarazo y la lactancia.
Formas de presentación: En infusión (hasta 3 tazas diarias), en tintura, extracto líquido, la decocción para baños y colirios, el aceite esencial en gotas, cápsulas o para inhalaciones, asi como pomadas, cremas y champús que lo contienen.
Nuestro remedio: Tisana balsámica y antitusiva, que combina a partes iguales tomillo, brotes de pino silvestre, eucalipto, ajedrea y anís verde, una cucharada sopera de la mezcla por cada vaso de agua. Hervir 2-3 minutos, dejar en reposo otros diez y colar. Añadir una cucharadita de miel de tomillo y una rodaja de limón. Tomar hasta tres vasos al día, calientes.
 
2- Malvavisco, para suavizar la garganta
Es el malvavisco Althaea officinalis L. una planta de origen europeo, que crece cerca del agua, en riberas, canales, acequias e incluso marismas, porque es resistente a una cierta salinidad. Sus virtudes medicinales se conocen desde muy antiguo, y superan en intensidad a las de su pariente la malva. Se cosecha la raíz, durante el otoño, de plantas en su segundo año, cuando ya tiene 2 cm de grueso. En otros paises eurpeos existe la tradición de recolectar también las bellas flores y las hojas.
Principios activos: Mucílagos, pectina, flavonoides, almidón (hojas), aceite esencial.
Propiedades: Antitusivo, expectorante, demulcente, antiinflamatorio, anticatarral, laxante.
A quien conviene: Es una planta mucilaginosa, muy eficaz como protector de las mucosas respiratorias y digestivas. Calma la irritación de garganta y combate la tos irritativa. Se indica como un bálsamo de primer orden para aliviar los resfriados, los procesos gripales, y la congestión pulmonar, en bronquitis y estados asmáticos leves. Es una planta que no debe faltar en casa, sobre todo en los periodos en que somos más propensos a sufrir catarros o cuando estamos más expuestos a cambios bruscos de temperatura. El malvavisco se destina igualmente a neutralizar los excesos de ácidos estomacales, en úlceras pépticas y gastritis, asi como para combatir el estreñimiento.
Precauciones: Ninguna
Formas de presentación: En decocción de raiz o infusión de hojas y flores (3-4 tazas diarias), en tintura, jarabe, extracto líquido y la decocción para colirios, baños o gargarismos.
Nuestro remedio: Para combatir la infección pulmonar, la irritación de garganta y acabar con la tos, contamos con la fórmula que combina malvavisco con  pulmonaria, brotes de abeto y llantén mayor. Una cucharada sopera rasa por vaso de agua. Hervimos 2 minutos y lo mantenemos en infusión cinco minutos más. Se filtra y se le añade una cucharadita de miel. Se recomiendan tres tazas calientes al día, cada cuatro horas.
 
3- Pino albar, para eliminar la congestión
El albar o silvestre Pinus sylvestris L. es la especie de pino más común en Europa, pero en nuestro país se restringe a las montañas del Prepirineo, sistema Ibérico y Bético y el Cantábrico, donde forma bosques densos, mezclado a veces con hayas. de este pino y del abeto se ha cosechado de manera tradicional la trementina, una oleorresina de la que por destilación se obtiene el aguarrás y la colofonia. Se cosechan los brotes o yemas, que como describe Font Quer, "son los cogollitos aglomerados, colectados antes de que se estiren"
Principios activos: Aceite esencial con pineno, limoneno, sabineno, terpineno, esencia de trementina, flavonoides, taninos.
Propiedades: Antiséptico, expectorante, antiviral, febrífugo, diurético, inmunoestimulante, vasoprotector.
A quien conviene: Brotes y hojas del pino albar constituyen un aliado poderoso para todas aquellas personas propensas a sufrir infecciones respiratorias de manera recurrente. El aceite esencial le confiere efectos balsámicos y antisépticos, y se muestra muy eficaz para actuar de barrera a la acción de los microorganismos. Refuerza nuestra respuesta autoinmune y contribuye a eliminar la mucosidad. Los remedios con pino albar se recomiendan para todo tipo de afección respiratoria, con o sin infección, desde simples resfriados, a estados gripales, sinusitis, laringitis, faringitis, traqueitis y bronquitis, asi como en procesos alérgicos con rinitis y dificultades para respirar. El pino albar se indica también en trastornos urinarios y reumáticos, y como alivio en dolores dentales.
Precauciones: La decocción de la corteza o las ramas puede resultar irritante para algunas personas. Evitar el aceite esencial por vía oral, y no exponerse al sol, tras su uso por vía tópica.
Formas de presentación: En infusión o decocción, generalmente en combinación con otras plantas (2-3 tazas al día), en inhalaciones de la infusión o el aceite esencial, infusión para baños, friegas o gargarismos.
Nuestro remedio: Para despejar la garganta y eliminar la congestión pulmonar, inhalaciones de 20 g de brotes de pino y 20 g de hojas de mirto (o eucalipto) por litro de agua. Respirar el vapor, tapándonos la cabeza con una toalla o paño, durante unos minutos, y repetir la operación poco antes de acostarnos. La alternativa es la infusión de pino albar, con malva, llantén y liquen de Islandia.
 
4- Erísimo, para acabar con la afonía
Es el erísimo o sisimbrio Sisymbrium officinale (L.) Scop. una planta arvense y ruderal muy abundante en casi todo Europa, que aparece en los márgenes de caminos y los descampados, y que se encuentra florida casi todo el año. Con fines medicinales se cosecha la planta entera, que los herbolarios aprecian mucho por sus virtudes mucilaginosas.
Principios activos: Aceite esencial, pectina, mucílagos, glucósidos cardiotónicos.
Propiedades: Demulcente, balsámico, antiinflamatorio, antiespasmódico, diurético.
A quien conviene: Es una planta muy común en márgenes de caminos, que se ha utilizado tradicionalmente para combatir la ronquera. Se la ha llamado, por este motivo, la hierba de los cantores, porque consigue devolver la voz a personas afectadas de afonía. Se ha recomendado a personas que tienen en su voz una herramienta de trabajo, como los citados cantantes líricos, pero también oradores, profesores y conferenciantes, para despejar las vías respiratorias altas. Reduce la tos y la irritación de garganta, y se indica, además de para inflamaciones de faringe y laringe, para afecciones bronquiales y asma. Precauciones: Evitar si existe obstrucción de las vías biliares.
Formas de presentación: En infusión, combinada con otras hierbas (2-3 vasos al día), en jarabe para la tos, extracto líquido y tintura.
Nuestro remedio: Para la afonía, a partes iguales, erísimo, malvavisco y junco de río Holoschoemus romanus. Una cucharada de cada ingrediente por medio litro de agua. Hervir 3-4 minutos, a fuego lento, dejar reposar unos 4-5 minutos y filtrar. Añadir miel o azúcar candi y tomar en caliente, hasta 4 veces durante el día.
 
5- Limonero, para bajar la fiebre
Originario del Asia sudoriental, el limonero Citrus limonum (L.) Burn. se ha plantado en la cuenca mediterránea desde muy antiguo, y hoy día España es juntamente con Italia, Estados Unidos e Israel el máximo productor mundial. A las incontables aplicaciones culinarias del limón, se suman sus poderosas virtudes curativas, que hacen de este cítrico un objeto de veneración. Con fines medicinales se emplea tanto la pulpa como la corteza, cargada éste de esencia.
Principios activos: Aceite esencial con limoneno, citral, pineno y citronelal, flavonoides (hesperidina), cumarinas, mucílagos, vitamina C, azúcares.
Propiedades: Antiséptico, antibacteriano, vitamínico, remineralizante, tónico venoso, vasoprotector, digestivo, carminativo, antidiarreico, demulcente, febrífugo, analgésico, antiinflamatorio, cicatrizante.
A quien conviene: Que el limón es un tesoro para salud ya no es un secreto para nadie. Es una fuente privilegiada de vitamina C, de la que aporta hasta 53 mg por cada 100 g de limón consumido. Es esta riqueza en vitamina C lo que hace del limón una magnífica arma preventiva contra la acción de virus y bacterias, al aumentar las autodefensas del organismo con la activación de glóbulos blancos. Resulta especialmente recomendable para estados de debilidad, anemia y convalecencia por una enfermedad reciente. Reduce las décimas de fiebre y favorece la expectoración, lo que explica que se conozcan muy diversos remedios tradicionales con limón, destinados a combatir los procesos gripales y los estados febriles. No obstante las bondades del limón van mucho más allá, y se destina  al tratamiento de los déficit venosos, la hipertensión, como diurético en afecciones genitourinarias, como tónico digestivo en náuseas y diarreas, y en uso tópico sobre trastornos cutáneos, conjuntivitis, llagas bucales, etc.
Precauciones: Consultar con un especialista antes de consumir el aceite por vía oral.
Formas de presentación: El zumo fresco, la corteza del fruto fresca, en infusión, decocción o maceración, extracto líquido y tintura, el aceite esencial en usos de aromaterapia (baños, masajes y vaporizaciones).
Nuestro remedio: Para curar las anginas y para acabar con los focos de pus y el dolor al deglutir, contamos con este remedio tradicional, que consiste en el zumo de limón asado (escalivat). Se corta el limón por la mitad y se pincha con un tenedor. Por la parte de la piel, se dora al fuego y cuando empieza a hervir, se exprime. Este zumo favorece que las capas de pus se vayan desprendiendo. Se debe tomar una vez al día, en pequeños sorbos.
 
6- Equinacea, para fortalecer nuestras defensas    
Originaria de América del Norte, las virtudes medicinales de la bella equinácea Echinacea angustifolia  D. C. ya eran sobradamente conocidas por los pueblos indígenas de la zona. Los preparados de equinácea, elaborados a partir de hasta 9 plantas de este género, especialmente la ya citada y E. purpurea L. gozan de una alta consideración y la han convertido en la planta autóctona norteamericana más estudiada, recetada y vendida. Se cosechan las flores, hojas y la raíz.
Principios activos: Aceite esencial, ácido caféico (equinacósidos, cinarina), alcaloides pirrolizdínicos, polisacáridos, isobutilamidas, antocianósidos.
Propiedades: Inmunoestimulante, antiviral, antibiótica, antiinflamatoria, antitérmica, diaforética, antialérgica.
A quien conviene: Estamos ante una planta muy estudiada por la comunidad científica, que se ha convertido en uno de los recursos herbarios más recurrente como estimulante de la respuesta inmunitaria. Actúa sobre los macrófagos, a través de la activación de la fagocitosis histogénica -de los tejidos- y hematológica -de la sangre-, con un aumento apreciable en la generación de leucocitos y una aceleración del flujo sanguíneo, es decir, potenciando la capacidad de estas células para engullir y eliminar o bien neutralizar los agentes patógenos extraños, como bacterias o células infectadas por virus. Se muestra muy útil como estimulante de las defensas no específicas del organismo, para la prevención y tratamiento de las infecciones víricas y bacterianas que afectan al tronco respiratorio, como procesos gripales, bronquitis, faringitis, sinusitis y amigdalitis, así como en procesos alérgicos con tos, congestión y otros síntomas asociados como rinitis y conjuntivitis. La equinácea se utiliza, en tintura, sobre quemaduras, heridas ulcerosas, forúnculos, eccemas, granos y para tratar las infecciones de oído.
Precauciones: Se desaconseja su uso durante el embarazo y la lactancia, y en caso de existir alteraciones hepáticas graves. Está contraindicada también a diabéticos y a pacientes con inmunodeficiencias, esclerosis múltiple y tuberculosis. Se han detectado algunos casos de reacciones alérgicas y determinadas incompatibilidades con fármacos (anabolizantes, esteroides). Por otro lado, preparados de equinácea en forma líquida tomados por vía oral han provocado una leve irritación en labios y lengua en algunas personas, y pueden aumentar la salivación.
Formas de presentación: En tintura (50 gotas en tres tomas diarias), extracto líquido, planta seca para infusión, raíz troceada para decocción, jarabe, comprimidos, pastillas para ensalivar, caramelos.
Nuestro remedio: Para estimular las defensas, cápsulas de polvos de equinácea, hasta 250 mg diarios, en tratamientos discontinuos. Para el dolor de oídos, tinturas de equinácea, tomillo y gordolobo, una cucharada sopera de la mezcla disuelta en agua o zumo, para tomar 3 veces al día.
 
7- Violeta, freno para la tos
Anunciando la llegada de la primavera, ya a finales de febrero la violeta Viola odorata L. emerge de la hojarasca en bosques húmedos y riberas de casi toda Europa. De entre las numerosas especies de violas, es ésta la que con mayor frecuencia se emplea en fitoterapia. Además de sus bellas flores, se cosechan también las hojas y las raíces.
Principios activos: Mucílagos, glicósidos fenólicos, saponinas (violina), antocianósidos (violamina), aceite esencial, ácido salicílico, flavonoides y alcaloides (odoratina) en la raiz.
Propiedades: Demulcente, expectorante, sudorífica, analgésica, febrífuga, antitusiva, hipotensora.
A quien conviene: Es una planta muy rica en mucílagos, que resulta muy eficaz para proteger y reparar las mucosas respiratorias. Alivia la irritación de garganta y combate la tos, la congestión pulmonar y la sensación de trancazo, con presión en el pecho y dolor muscular. Se indica en resfriados, procesos gripales, estados febriles, faringitis y laringitis. La violeta es prescrita para regular la tensión arterial y para calmar el dolor reumático.
Precauciones: Dosis altas de la raiz pueden resultar vomitivas.
Formas de presentación: En jarabe para la tos, infusión o decocción caliente (hasta 3 vasos diarios), en tintura y extracto líquido.
Nuestro remedio: Tisana para la tos persistente e irritativa, que combina violeta, llantén mayor, agrimonia y líquen de Islandia, a partes iguales. Una cucharada sopera rasa de la mezcla por taza. Hervir uno o dos minutos, dejar 10 más en reposo y filtrar. Tomar hasta 4 tazas al día, la última una hora antes de acostarse.
 
8- Otras plantas eficaces:
-- Liquen de islandia, en infusión, decocción o jarabe
-- Eucalipto, en decocción, inhalaciones y pastillas
-- Mirto, en infusión, inhalaciones o pastillas
-- Borraja, en decocción, infusión, jarabe, tintura y cápsulas
-- Pulmonaria, en infusión, decocción, extracto líquido
-- Ulmaria, en infusión, jarabe, extracto líquido, cápsulas
-- Saúco, en infusión, jarabe, extracto líquido y tintura
-- Marrubio blanco, extracto líquido, tintura y cápsulas
-- Abeto, en infusión, extracto líquido, jarabe, inhalaciones
 
9- Aromaterapia:
-- Aceites esenciales de mirto, eucalipto, ajedrea, orégano, bergamota, limón, naranja, hisopo y lavanda, aplicados en baños, masaje, vaporizaciones o inhalaciones.
 
 
PLANTAS PARA LAS ALERGIAS
 
La alergia es la respuesta normal que nuestro sistema inmunitario manifiesta cuando  entra en contacto con un organismo extraño. Si bien en otoño la causa principal de las alergias son los ácaros, y en general el polvo que se genera en el interior de las casas, cuando llega la primavera, el mayor peligro lo representan el polen y las picaduras de insectos. Se calcula que algo más del 15% de la población española padece este tipo de alergia y a un 70% de estas personas las alergias condicionan de manera sensible sus vidas. La polinosis, alergia respiratoria provocada por el polen de determinadas plantas, está registrando un alarmante aumento cada año y según los expertos puede responder a la expansión de un tipo de flora con plantas más polinizadoras, beneficiadas por el incremento de las temperaturas medias. También las escamas, las plumas, el pelo de nuestras mascotas o animales de compañía son fuentes habituales de alergias respiratorias. Estornudos frecuentes, picor, congestión y obstrucción nasal son las manifestaciones más comunes, pero muchas veces irá acompañado de lagrimeos, conjuntivitis y dolor de oídos. Junto a las rinitis alérgicas y los ataques de asma alérgica, se producen también alergias como reacción a determinados alimentos y medicinas, y que suelen manifestarse con diarreas y urticarias, por el contacto con ciertos metales como el níquel o el cobalto, presentes en utensilios de uso habitual como las tijeras, a la lana o a algún otro tipo de tejido, sin olvidarnos de las producidas por las picaduras de insectos. Desde sencillos pero eficaces sprays o inhaladores a vacunas antialérgicas, diversas son las opciones farmacológicas para combatir las alergias en sus diferentes manifestaciones. Contra las alergias respiratorias se prescriben pastillas antihistamínicas, contra las picaduras, pomadas y sedantes para reducir el picor. El inconveniente principal de estos antihistamínicos es que suele producir una cierta sensación de sopor, lo que los hace peligrosos para aquellos que tengan que conducir.
Frente a la medicina convencional, la fitoterapia ofrece la posibilidad de enfrentarse a las alergias de una manera global, estimulando las glándulas suprarrenales y en general favoreciendo la activación de nuestras propias defensas. Hemos seleccionado 4 de las más eficaces:
 
1- Llantén mayor, para reducir la mucosidad  
Tanto el llantén mayor Plantago major L, como el llantén mediano, ambos de ambientes húmedos, en prados y riberas, como el menor P. lanceolata L, de ambientes más secos, se usan indistintamente en fitoterapia, al compartir las mismas virtudes medicinales. Son plantas muy comunes, que cuentan con múltiples aplicaciones tradicionales, y sus grandes hojas se han consumido frescas en ensaladas. Con fines medicinales se cosechan hojas y flores.
Principios activos: Mucílagos, pectina, taninos, glucósidos iridoideos (aucubósidos), ácidos fenólicos, flavonoides, cumarinas, sales minerales.
Propiedades: Demulcente, expectorante, antialergénico, antiespasmódico, antiinflamatorio, antibacteriano, astringente, diurético, depurativo, laxante.
A quien conviene: Para quien sea propenso a padecer alergias respiratorias, a causa del polen, el polvo o la contaminación atmosférica, y que se manifieste con rinitis, conjuntivitis, sensaciones de ahogo y lagrimeos. Es útil para combatir la infección en las vías respiratorias altas y para reducir la mucosidad. El llantén es una planta versátil, que se destina también para incluirla en formulaciones laxantes, hipotensivas y diuréticas, en este caso, sobre todo, para favorecer la reducción de la urea y el ácido úrico, y en trastornos hepáticos leves.
Precauciones: Ninguna
Formas de presentación: En infusión y decocción, jarabe, extracto líquido, tintura y decocción para colirios y colutorios.
Nuestro remedio: Para aliviar las alergias, de 2 a 4 cucharadas soperas de jarabe de llantén al día. O bien, la infusión de llantén, con hojas de malva y agrimonia, a partes iguales. Hasta tres tazas al día, mientras persistan los síntomas.
 
Perpetua, enemiga de la rinitis
Planta característica del Mediterráneo, muy común en nuestro país, la perpetua o siempreviva Helichrysum stoechas (L.) Moench. se cosecha para utilizarla en seco como bello adorno de mesa, por su capacidad en mantenerse bella por mucho tiempo, de ahí su nombre. Se encuentra en ambientes secos y soleados, como márgenes de carreteras y caminos, matorrales y arenales marinos. Las sumidades floridas se cosechan en primavera.
Principios activos: Aceite esencial, flavonoides (helicrisina), fitosteroles, helipirona, italipirona.
Propiedades: Antialérgica, antiinflamatoria, antibacteriana, antiséptica, antitusiva, expectorante, febrífuga, antihelmíntica.
A quien conviene: Esta modesta mata, tan común en márgenes de caminos, se revela como uno de los principales recursos herbarios para luchar contra las alergias respiratorias. Es un aliado a tener en cuenta para aquellas personas que cada primavera sufren los efectos perniciosos de la polinización de determinadas plantas. Combate los diferentes síntomas de la alergia, como la rinitis y la conjuntivitis, con lagrimeos, mucosidad abundante, congestión pulmonar y tos persistente. Está indicada también para rebajar la inflamación de las amígdalas, en estados gripales, bronquitis y procesos asmáticos leves. Se ha usado tradicionalmente como un medio para eliminar las décimas de fiebre.
Precauciones: No se debe tomar el aceite esencial por via oral durante el embarazo, la lactancia y mucho menos administrarlo a niños menores de 6 años.
Formas de presentación: En infusión simple o combinada (2 tazas al día), en tintura, extracto fluido, jarabe para la tos e infusión para uso tópico en colirios y baños de asiento.
Nuestro remedio: Inhalaciones para la alergia, con la infusión que elaboramos mezclando a partes iguales perpetua, gordolobo y lavanda. Dos cucharadas soperas de la mezcla por 1/4 de litro de agua. Mientras hierve, respiramos el vapor o efectuamos unos vahos fuera fuego, cubriéndonos la cabeza con una toalla. También se recomienda el baño nasal en caso de rinitis.
 
3- Eufrasia, aliada de los ojos
Propia de pastos húmedos de montaña, la eufrasia Euphrasia officinalis L. es una planta semiparásita, pequeña, que casi pasa desapercibida. Su nombre se cree que pueda proceder de Euphrosynia, una de las tres gracias griegas, que se distinguía por su capacidad para traer la felicidad a las almas de los sufrientes. No obstante no fue hasta entrados en el siglo XIV, a finales de la Edad Media, que se encuentran numerosas referencias del poder milagroso del agua de eufrasia para el cuidado de la vista. Se le atribuía el poder de devolver la vista al ciego y de alejar el demonio de los ojos.
Principios activos: Flavonoides (quercetósidos), heterósidos irioideos (aucubósido, eufrósido), ácidos fenólicos (caféico, vainíllico), aceite esencial, lignanos y taninos gálicos.
Propiedades: Astringente, antiinflamatoria, antialérgica, hemostático local, cicatrizante, antiséptica, digestiva, antidiarreica.
A quien conviene: A todas aquellas personas propensas a sufrir alergias respiratorias, como la alergia primaveral, por la exposición a humos o polvo o la producida por una eventual picadura de insecto, y que se manifiesta más o menos aparatosamente con la inflamación de la conjuntiva del ojo, lagrimeos frecuentes e inflamación de los párpados y del contorno de los ojos. La eufrasia es la planta predilecta por los herbolarios para tratar la conjuntivitis y otros problemas que afectan a nuestros ojos, como la vista cansada y la aparición de los inoportunos orzuelos. Como astringente, via oral se indica para aliviar diarreas puntuales, y en uso externo, además de lo dicho, para curar hemorragias superficiales, hemorragias nasales y sangrados bucales, asi como en faringitis e inflamación del oído.
Precauciones: Por su alto contenido en taninos, evitarla por vía oral en caso de gastritis y úlcera gastroduodenal.
Formas de presentación: Planta seca para infusión (3 vasos al día), en tintura, extracto líquido, y la infusión para servirla como colirio, colutorio, gargarismo y baño local.
Nuestro remedio: Para ataques alérgicos, con rinitis y accesos de tos persistente, puede ser muy eficaz la infusión que preparamos, a partes iguales, con eufrasia, llantén mayor, ortiga y eupatorio. Una cucharada sopera por taza de agua. Hervimos durante tres minutos, lo dejamos en infusión, tapado y filtramos. Se deben tomar tres tazas calientes al día, ampliable a cuatro si la mucosidad es muy densa. La infusión simple de eufrasia, o asociada a saúco, aplicada templada con un lavaojos, reduce la inflamación.
 
4- Gordolobo, apoyo para los asmáticos
De las cerca de 400 especies de gordolobo que se conocen, unas 15 se encuentran en Europa. El más utilizado en fitoterapia es Verbascum thapsus L, una planta de grandes proporciones, que aparece en prados de montaña, claros de bosques y terrenos alterados por talas o aludes. Los gordolobos gozan de una añeja tradición popular. El polvillo de sus flores se ha utilizado para provocar los estornudos. Se cosechan éstas, en sus largas inflorescencias, y en menor medida, también las hojas.
Principios activos: Mucílagos, saponósidos triterpénicos, flavonoides (verbascósido, hesperósido), heterósidos iridoideos (aucubósido), aceite esencial, taninos.
Propiedades: Demulcente, antiinflamatorio, expectorante, antitusígeno, antialergénico, antihistamínico, diurético.
A quien conviene: Las flores de esta robusta planta de montaña destacan por su alta concentración de mucílagos, lo que hace de ellas un excelente protector y reparador de las mucosas respiratorias. Es muy útil para combatir las alergias respiratorias, con rinitis, tos persistente, congestión y mucosidad abundante. Es igualmente eficaz en afecciones respiratorias de tipo infeccioso en amigdalitis y estados gripales, asi como para tratar la bronquitis y el asma. En uso externo, se aplica sobre urticarias, pruritos, quemaduras, escaldaduras y forúnculos.
Precauciones: Filtrar bien la infusión para evitar que los restos de planta puedan provocar irritación en la garganta. No olvidemos que el polvillo de sus hojas se ha usado para provocar el estornudo.
Formas de presentación: En infusión simple o combinada (hasta tres tazas al día), en tintura, extracto líquido y cápsulas. La infusión o decocción para aplicar en colirios, lavados o compresas, y las hojas frescas en cataplasmas para problemas dermatológicos.
Nuestro remedio: Fórmula expectorante, para facilitar la expulsión de mucosidad, que combina a partes iguales, gordolobo, raiz de regaliz y de malvavisco, violeta y anís estrellado. Dos cucharadas soperas de la mezcla por 1/4 l de agua. Hervir 4-5 minutos las raíces y el anís estrellado, y añadir en el instante en que arranca a hervir, el resto de las plantas. Dejar en reposo 8-10 minutos, tapado, filtrar y edulcorar con miel de tomillo. Tomar bien caliente, unas 3 veces al día.
 
5- Otras plantas eficaces:
-- Aciano, para conjuntivitis y blefaritis, infusión en baños oculares o colirios.
-- Hisopo y helenio, como expectorantes, en decocción, tintura, extracto y compresas.
-- Saúco, como demulcente y astringente, en conjuntivitis y rinitis, aplicado en infusión para colirios y baños.
-- Grosellero negro, como antiinflamatorio, en conjuntivitis y blefaritis, aplicado en extracto líquido, cápsulas y jarabe.
-- Árnica, como antiinflamatoria, en picaduras de insectos, en cremas o pomadas.
-- Té de rooibos, como expectorante y antialergénico, en rinitis y conjuntivitis, aplicado  en infusión simple.
-- Equinácea, como inmunoestimulante, en tintura, cápsulas, comprimidos.
-- Abrótano hembra, como antiinflamatoria y expectorante, en conjuntivitis y rinitis, en infusión para colirios y baños locales.
 
6- Aromaterapia. Aceites esenciales aplicados en inhalaciones, baños o masajes. Los más recomendados son: Lavanda, melisa, albahaca, manzanilla, limón, eucalipto, hisopo, cayeput, salvia romana, pino silvestre.
 
 
PLANTAS PARA EL CORAZÓN
 
La sangre es la savia de nuestro organismo, que impulsada desde el corazón, fluye por las venas en todas direcciones para permitir que todas y cada una de las funciones vitales se desarrollen correctamente y nos permitan disfrutar de una vida plena. Cualquier obstáculo o alteración en ese complejo recorrido puede significar un trastorno más o menos grave en la salud de las personas. Taquicardias, sensaciones de manos o pies dormidos, presencia persistente de hormigueos, aparición de varices o hemorroides, o situaciones más complejas como tensión arterial elevada y arteriosclerosis son dolencias vinculadas a alteraciones en la circulación sanguínea. Muchos son los agentes que influyen en una mala circulación de la sangre, desde cosas tan simples como la forma de vestir o calzarnos, a aspectos relacionados con nuestra forma de vivir, caracterizada muchas veces por una escasez de ejercicio físico y el mantenimiento de malas posturas en el trabajo o la escuela, pasando por una alimentación inadecuada, con un exceso de grasas y dulces. Una primera recomendación es ejercer algo tan sencillo y saludable como es caminar, para seguir por la corrección de determinados hábitos alimenticios, reducir el consumo de tabaco y alcohol, hacer ejercicio, respirar aire puro y plantar cara al estrés.
    Pomadas y cremas con antiinflamatorios, antibióticos y venotónicos se prescriben para tratar las hemorroides, varices y flebitis. Los principios activos que contienen estas sustancias pueden causar a veces cefaleas, náuseas, diarreas, problemas estomacales y erupciones cutáneas. Sedantes y ansiolíticos se utilizan para calmar las arritmias y taquicardias, generando en algunos casos cuadros de ataxia o pérdida de coordinación, hipotensión y somnolencia. La hipertensión arterial, que en la mayoría de los casos no obedece a una causa identificable, se suele tratar con antihipertensivos clínicos, como pueden ser los antagonistas de los receptores de la angiotensina, una sustancia responsable del estrechamiento de las venas, asi como diuréticos y tranquilizantes. Para la arteriosclerosis el mejor tratamiento es la prevención, reduciendo los factores de riesgo y controlando estrictamente la presión arterial. Como alternativa y en algunos casos como terapia de apoyo a determinados tratamientos clínicos, los herbolarios nos recomiendan para aliviar las diferentes dolencias asociadas a una mala circulación, en problemas venosos y cardiacos, remedios herbarios que incorporan alguna de las siete plantas que aquí hemos seleccionado:
 
1- Espino albar, para la tensión y las arritmias
Presente en toda Europa, el espino albar Crataegus monogyna Jacq. se encuentra en setos, márgenes de bosques y riberas. Sus frutos son muy buscados por las aves. Con fines medicinales se cosechan las hojas y las flores, y en menor medida los frutos y la corteza.
Principios activos: Flavonoides (hiperósido, rhamnósido), heterósidos, ácidos crataególico y ursólico, antocianósidos, esteroles, aminas (trimetilamina), colina, ácido esencial.
Propiedades: Tónico cardiaco, vasodilatador coronario, hipotensor, antiarrítmico, diurético, antiespasmódico, sedante, relajante muscular.
A quien conviene: Por su efecto cardiotónico, el espino albar es uno de los mejores recursos herbarios para reforzar el corazón. Al conseguir apaciguar la aceleración de los latidos, actúan bien en perturbaciones del ritmo cardiaco, arritmias, taquicardias y fibrilación auricular. Aumenta el riego sanguíneo en las arterias coronarias, aleja la posibilidad de que se produzcan coágulos, siendo por ello un apoyo útil en la prevención de tromboembolias. Dilata los músculos que rodean los principales vasos sanguíneos y por tanto se aconseja para combatir el espasmo causante de la angina de pecho. Los herbolarios lo aconsejan también en caso de vértigos, como un buen apoyo para controlar la tensión arterial y para prevenir las insuficiencias cardiacas leves y la arteriosclerosis. Asociado a plantas sedantes, como la valeriana, resulta muy útil para calmar los nervios y la tensión muscular, en úlceras por estrés, y en los trastornos nerviosos propios de la perimenopausia.
Precauciones: Se puede usar de forma prolongada, pero se recomiendan tratamientos discontinuos, en dosis ajustadas. No simultanear con la toma de medicamentos cardiotónicos y antiarrítmicos.
Formas de presentación: Planta seca para infusión simple o combinada (una o dos tazas al día), en extracto líquido, tintura, comprimidos y cápsulas.
Nuestro remedio: Para la hipertensión y las palpitaciones, una tisana que combina a partes iguales espino albar, melisa, valeriana y tila. Una cucharada sopera de la mezcla por taza. Hervir 2-3 minutos, dejar reposar y filtrar. Añadir una pizca de miel de azahar y tomar hasta tres tazas al día.
 
2- Rusco, bálsamo para la insuficiencia venosa
Emparentado con las esparragueras, el rusco Ruscus aculeatus L. es una planta muy común en la Europa mediterránea, que se encuentra en ambientes sombreados de encinares, pinares y riberas. El rizoma y la raíz se cosechan a finales de invierno o a finales del verano. Las atractivas bayas rojas son tóxicas.
Principios activos: Saponósidos (ruscogenina), flavonoides (rutina), hesperidósidos, sales minerales.
Propiedades: Vasoconstrictor venoso, estimulante circulatorio, tónico venoso,  protector capilar, antihemorroidal, antiedematoso, antiinflamatorio, diurético.
A quien conviene: Los expertos consideran al rusco como uno de los tónicos venosos más poderosos que se conocen. Se impone como un aliado excepcional para todas aquellas personas que son propensas a sufrir problemas de insuficiencia venosa, como varices, hemorroides y flebitis. Pero también para quien presente una cierta tendencia a tener los pies y las manos fríos o adormecidos, las piernas y los brazos hinchados, la sensación de molestos hormigueos en los dedos, o un mayor riesgo a padecer  moratones o cardenales en la piel. Frena las menstruaciones abundantes y combate los edemas y la retención de líquidos, asi como los trastornos urinarios. Como diurético y antiinflamatorio, se indica igualmente en el tratamiento de la tensión alta y la gota.
Precauciones: Las bayas son altamente tóxicas, deben evitarse a toda costa. El rusco, como diurético, no puede ser consumido en caso de hipertensión o insuficiencia renal sin el preceptivo control médico.
Formas de presentación: En decocción, combinado con otras plantas de efectos afines (hasta 3 tazas al día), en extracto líquido, tintura, cápsulas, ampollas, supositorios y la decocción para baños locales y friegas.
Nuestro remedio: Baño local para las varices, que elaboramos con rusco, castaño de indias, malvavisco y corteza de naranjo amargo, en cantidades de 20 g, para medio litro de agua. Hervimos 3-4 minutos, dejamos que repose unos 8-9 minutos y colamos. Se aplica tibio empapando unas compresas o bien en baño local de la zona afectada por las varices.
 
3- Meliloto, remedio para las varices
Los melilotos, de los que se conocen unas veinte especies en Europa, son unas plantas tiernas, de flores en espigas densas, que emanan un agradable aroma a hierba fresca cuando las estrujas. El meliloto oficinal Melilotus officinalis L. es propio de herbazales húmedos de montaña y se encuentra en el cuadrante nororiental de la península. Se cosechan las sumidades floridas, en plena primavera.
Principios activos: Heterósidos cumarínicos (melilotósido), saponósidos, flavonoides, ácidos fenólicos y taninos.
Propiedades: Tónico venoso, vasoprotector, anticoagulante, diurético, antiespasmódico, activador del sistema linfático, sedante suave, relajante muscular.
A quien conviene: El meliloto se comporta como un fluidificador natural de la sangre, lo que explica su uso en fitoterapia para el tratamiento de todo tipo de problemas relacionados con un déficit en el riego sanguíneo y un estancamiento de fluidos, como la aparición de venas varicosas o varices, flebitis, hemorroides, edemas, asi como en la prevención de tromboembolias. Elimina la sensación de brazos y piernas pesados, asi como los calambres, y combate la aparición de cardenales y sabañones. Alivia la tensión muscular, las lumbalgias y los dolores espasmódicos de la menstruación. En uso externo, se aplica en conjuntivitis, blefaritis y heridas leves.
Precauciones: No simultanear con tratamientos anticoagulantes. Es preferible cursar tratamientos leves y discontinuos. Evitar dosis elevadas.
Formas de aplicación: En infusión simple o combinada (hasta 3 tazas al día), jugo de planta fresca, tintura, extracto líquido, infusión para baños, friegas, compresas y colirios, pomadas y cremas que lo contienen.
Nuestro remedio: Como estimulante circulatorio y anticoagulante, combinamos meliloto con rusco, hamamelis y ginkgo, a partes iguales. Dos cucharadas soperas rasas de la mezcla por medio litro de agua. Se hierve dos minutos, se deja reposar unos 10 minutos, y se puede tomar durante el día, incluso frío. Como el sabor puede resultar muy amargo, se recomienda añadirle un poco de zumo de limón o miel de castaño de indias.
 
4- Travalera, para la diabetes
De las casi 500 especies de centaureas que se conocen, unas 30 son características de la Europa mediterránea, y entre ellas la centaura áspera o travalera Centaurea aspera L, planta muy abundante en márgenes y herbazales de lugares secos y soleados. Se puede encontrar florida durante casi todo el año, y de ella se cosechan los capítulos florales, tallos y hojas.
Principios activos: Heterósidos cianogénicos, lactonas sesquiterpénicas
Propiedades: Hipoglucemiante, aperitiva, digestiva, antiinflamatoria, antiséptica, colerética, colagoga.
A quien conviene: A personas diabéticas, como un apoyo desde la medicina natural a los tratamientos que puedan estar siguiendo. Se ha probado la capacidad de ésta y otras centauras afines para reducir la presencia de azúcar en sangre y orina en diabéticos. Su efecto hipoglucemiante es suave pero eficaz, y permite tratamientos prolongados. Como planta amarga, estimula los jugos gástricos y favorece el aumento del apetito. Se prescribe a personas desganadas o debilitadas, a jóvenes anoréxicas y en periodos de convalecencia. Está indicada también en desajustes de la digestión, como infecciones con diarrea o náuseas, en intoxicaciones alimentarias leves y como remedio herbario para reequilibrar las funciones del hígado y la vesícula tras una alteración hepática.
Precauciones: Las personas diabéticas, antes de usar esta planta, deben controlar los niveles de glucemia, para ajustar, si es preciso, las dosis de insulina o de antidiabéticos orales a una mayor o menor concentración de planta en la decocción.
Formas de presentación: Planta seca para infusión o decocción, en polvos, en extracto líquido y comprimidos.
Nuestro remedio: Una fórmula magistral antidiabética que combina travalera con las hojas de gymnema y las vainas de judía, más una ramita de canela para evitar añadir azúcar. Se debe hervir 3-4 minutos una cucharada sopera de la mezcla por vaso, dejar en reposo 10 minutos y tomar tres veces al día, tras las comidas principales. Si no se quiere tomar en decocción, por encontrarlo demasiado amargo, se puede hacer en infusión, utilizando la planta muy triturada y dejándola apenas 5-6 minutos en reposo.
 
5- Alcachofera, para controlar el colesterol y los triglicéridos
Originaria del Magreb y Turquía, la alcachofera Cynara scolymus L. se cultiva extensamente en Europa, siendo nuestro país el segundo productor mundial, por detrás de Italia. A las numerosas aplicaciones culinarias, la alcachofa suma sus excepcionales beneficios para la salud. Con esta finalidad se cosechan, además de las flores, con sus brácteas, las hojas e incluso la raíz.
Partes utilizadas: Hojas, flores (brácteas) y raíz
Principios activos: Cinarina, flavonoides (cinarósido), ácidos caféico y clorogénico, lactonas sesquiterpénicas (cinaropricina), sales potásicas.
Propiedades: Hipocolesterolemiante, colagoga, colerética, hepatoprotectora, diurética, hipotensiva, antibacteriana, aperitiva, digestiva.
A quien conviene: Para las personas a quienes en la analítica les aparecen altos los niveles del colesterol LDL y de triglicéridos, la alcachofera es su planta aliada. Los niveles del colesterol bueno o HDL deben estar por encima de los 0,35 g/l, los del colesterol malo o LDL, por debajo de 1,3 g/l y los triglicéridos, inferiores a 1,70 g/l. Sobrepasar estos límites es señal de que estamos acumulando un exceso de grasa en las arterias, lo que de entrada requiere el seguimiento de determinados hábitos alimenticios, que incluya una reducción drástica de alimentos ricos en grasas y colesterol. La alcachofa ayuda a controlar y disminuir estos niveles,  y por tanto reduce el riesgo cardiovascular, pero además destaca por su acción protectora sobre el hígado, muy útil en alteraciones hepatobiliares, hígado graso, vesícula débil y cálculos biliares. Como diurética, se muestra muy eficaz en caso de existir trastornos urinarios como la cistitis y los excesos de ácido úrico y urea, para controlar la tensión sanguínea y disminuir la retención de líquidos y los edemas.
Precauciones: Evitar durante la lactancia (puede pasar la amargor a la leche materna), y en caso de existir obstrucción de las vías biliares.
Formas de presentación: En caldo, infusión de las hojas y brácteas (antes de las comidas), en tintura, extracto líquido y cápsulas.
Nuestro remedio: Fórmula magistral para bajar el colesterol, que incluye a partes iguales, alcachofera, diente de león, cúrcuma, naranjo amargo y menta. Una cucharada sopera de la mezcla por taza de agua. Hervir 2-3 minutos, dejar reposar 10 más y filtrar. Tomar tres tazas al día, tras las comidas principales.
 
6- Pie de león, para cortar hemorragias
Originaria de las montañas europeas, incluidos los Pirineos, el Cantábrico y Sierra Nevada, el pie de león o alquemila Alchemilla vulgaris L. se conoce así por la forma arriñonada de sus hojas, que puede recordar un pie o una huella de felino. El rocío de la mañana hace que se acumule en el centro de la hoja una o más gotas, que al brillar recuerdan diminutas perlas. Las hojas tiernas se consumen en ensaladas, y éstas y las flores se utilizan con fines medicinales.
Principios activos: Taninos, ácidos salicílico y palmítico, saponósidos, fitosteroles, flavonoides.
Propiedades: Tónico venoso, vasoprotector, hemostático, antihemorrágico, antidiarreico, cicatrizante, febrífugo, analgésico, bactericida.
A quien conviene: Para aliviar los problemas de insuficiencia venosa, en venas varicosas, hemorroides sangrantes y flebitis. Usada externamente es muy útil para detener las hemorragias nasales, los sangrados en la boca y los producidos en la piel por cortes y caídas, y para acelerar su cicatrización. Se indica igualmente a mujeres afectadas de menstruaciones abundantes o de excesiva duración. Como diurética y antiséptica, combate las infecciones urinarias, y se ha empleado tradicionalmente en resfriados y estados gripales.
Precauciones: Evitar en el embarazo, la lactancia, y en caso de gastritis y úlcera gastroduodenal.
Formas de presentación: En infusión, hasta tres tazas tras las comidas, en extracto líquido, tintura, cápsulas y decocción para aplicar en baños, friegas o colutorios.
Nuestro remedio: Fórmula para el sangrado bucal o las encías sangrantes, que combina pie de león, con cardo mariano, cola de caballo y malva. 20 g de cada planta por medio litro de agua. Hervir 4-5 minutos, dejar reposar y filtrar. Cuando deje de estar caliente, se aplica en enjuague completo, varias veces al día, hasta que remita el sangrado.
 
7- Ciprés, alivio para las hemorroides
El ciprés Cupressus sempervirens L. tiene su origen en el Mediterráneo oriental y Asia menor, pero se ha plantado extensamente en jardines, parques y cementerios de todo el mundo. El ciprés es en efecto un símbolo de duelo, pero también de longevidad y de inmortalidad. En la antigua China el ciprés era un símbolo de larga vida, y era tradición comer semillas crudas con el convencimiento de que asi se vivirían muchos años. Con fines medicinales se cosechas los falsos frutos o gálbulos, cuando están maduros y los brotes tiernos
Principios activos: Aceite esencial con cedrol, alfa-pineno y canfeno, flavonoides, taninos.
Propiedades: Astringente, hemostático local, antihemorrágico, venotónico, antiséptico, antiviral, analgésico, antiespasmódico.
A quien conviene: Para personas con problemas de insuficiencia venosa y mala circulación, los remedios con ciprés contribuyen a astringir las varices y hemorroides y a reforzar los vasos sanguíneos, devolviendo una sensación de alivio y seguridad en quien las padece. Se indica igualmente para combatir la incontinencia de orina, el exceso de sudoración y las menstruaciones excesivas. En uso externo, se aplica sobre heridas sangrantes, hemorragias nasales y bucales, y sobre infecciones víricas, verrugas, herpes, eccemas, neuralgias, ciáticas y dolores reumáticos.
Precauciones: No tomar el aceite esencial por vía oral.
Formas de aplicación: En decocción, combinada con otras plantas, extractos líquidos, tintura, cápsulas, aceite esencial en aromaterapia, pomadas, cremas, champús y lociones.
Nuestro remedio: Para las hemorragias nasales, mezclamos en cantidades de 20 g gálbulos de ciprés, bolsa de pastor, cola de caballo y anís verde, por medio litro de agua. Hervimos 2-3 minutos, dejamos en infusión y colamos. Empapamos una gasa o algodón y aplicamos sobre la fosa nasal, manteniendo la cabeza inclinada hacia atrás.
Para las hemorroides, preparamos un baño de asiento con ciprés, hamamelis y malva.
 
8- Otras plantas útiles:
-- Ginkgo, para problemas venosos y mala circulación, en infusión para baños, extracto líquido y cápsulas
-- Vid roja, para problemas venosos, edemas y metrorragias, en extracto líquido, infusión, el aceite de las semillas y las uvas en alimentación
-- Eupatorio, para hiperlipidemias y prevención del riesgo vascular, en infusión o decocción, extracto líquido y tintura.
-- Hojas de olivo, para la hipertensión, en extracto líquido, ampollas e infusión.
-- Paliure, para la hipertensión, en decocción de los frutos, extracto líquido y tintura.
-- Cúrcuma, para hiperlipidemias y prevención de accidentes cardiovasculares, en polvos, infusión, extracto líquido y tintura
-- Copalchi, para la diabetes mellitus, en decocción y extracto líquido
-- Gymnema, para la diabetes, en infusión combinada, extracto líquido y cápsulas
-- Tilo, para palpitaciones e hipertensión, en infusión
-- Vainas de judía, para diabetes e hiperlipidemias, en alimentación, polvos, extracto y tintura.
-- Bolsa de pastor, para hemorragias y problemas venosos, en infusión, baños y compresas.
-- Agripalma, para las arritmias, en infusión y extracto líquido.
 
9- Aromaterapia. Aceites esenciales de milenrama, ciprés, salvia romana, enebro, rosa, romero, canela, clavo, lavanda, valeriana y nerolí, en baños, masajes y aromatizadores.
 
 
 
PLANTAS PARA RELAJARSE
 
 
Los ataques de ansiedad, la irritabilidad nerviosa, el insomnio y sobre todo el estrés son problemas psíquicos que afectan a una buena parte de la población adulta, pero de los que tampoco se libran los más pequeños. Se calcula que una de cada cuatro personas es víctima del estrés. El trabajo, el ritmo de vida en exceso ajetreado, la presión que ejercen los compromisos laborales o estudiantiles, los conflictos familiares y hasta el ocio es fuente de estrés, lo cual no deja de ser una contradicción. El estrés produce descargas de adrenalina, la hormona que prepara a nuestro organismo para huir o defenderse de las amenazas externas, pero como tal peligro no suele ser nunca tan palpable y no llegamos a desfogarnos, la energía generada se nos queda dentro y nos mantiene en un estado de neurosis permanente. No menos preocupante es el azote del insomnio. Se ha calculado que entre un 25 y 30% de la población española tiene problemas ocasionales de sueño y que un 10% lo padece de forma crónica. Las mujeres y la gente mayor son los más propensos. Podemos hablar de insomnio cuando un mínimo de tres días por semana no se consigue conciliar el sueño, y de insomnio agudo o crónico cuando esta dificultad se prolonga por un periodo largo, de un mes o más, sin que los remedios caseros logren resolverlo. El insomnio está muy ligado a factores psicológicos, como la ansiedad, el estrés o la irritabilidad nerviosa, pero también a causas fisiológicas y a una incorrecta alimentación. No dormir bien no sólo nos impide estar lo suficientemente relajados para afrontar con ánimos la jornada y mostrarnos convincentes, sino que además puede tener consecuencias muy negativas para nuestra salud y para nuestro equilibrio emocional. Por eso es tan importante encontrarle un remedio. La fitoterapia nos ofrece una amplia gama de plantas medicinales que fomentan la relajación, reducen los estados nerviosos y permiten gozar de un sueño reparador. Hemos seleccionado 7 de las más eficaces:
 
1- Melisa, para las digestiones nerviosas
Relativamente frecuente en márgenes de bosques caducifolios y herbazales húmedos, y plantada en huertos y jardines, la delicada melisa Melissa officinalis L. nos obsequia con un intenso aroma que recuerda al de la flor del azahar -por ello también se la conoce como toronjil o tarongina en catalán-, y un sabor que hay quien define de alimonado. Lo cierto es que la infusión de melisa es una de las más consumidas para calmar los nervios, con la ventaja de su agradable sabor. La melisa se cosecha justo antes de que se abran sus menudas flores blancas, y se seca con bastante rapidez. Es una planta de fácil cultivo, que prospera bien en macetas de balcones o jardines.
Principios activos: Aceite esencial con limoneno, pineno y citral, ácidos fenólicos, flavonoides, mucílagos y taninos catéquicos.
Propiedades: Sedante, antiespasmódica, digestiva, aperitiva, carminativa, balsámica, antiséptica, cicatrizante.
A quien conviene: Para situaciones de tensión nerviosa, no extrema, porque es un sedante suave. Para facilitar la digestión y evitar la acidez y los espasmos nerviosos que con frecuencia la interfieren. Calma los estados de ansiedad leve, la irritabilidad y la jaqueca de origen nervioso. Asociada a otras plantas sedantes, puede servir para plantar cara al estrés. La melisa es una buena aliada de la salud de la mujer, que alivia la tensión premenstrual y los trastornos de tipo neurovegetativo vinculados a la menopausia. Combate las náuseas y los mareos, y contribuye a devolver el apetito perdido. A nivel externo, se usa como antiséptico y cicatrizante sobre heridas, picaduras de insectos, herpes simple y herpes labial.
Precauciones: No se debe tomar por via oral el aceite esencial durante el embarazo, la lactancia ni administrar a niños menores de 6 años, y en cualquier caso, se han descrito casos de somnolencia y bradicardia tras su consumo.
Formas de presentación: La planta seca para infusión (hasta tres vasos al día), en extracto líquido, tintura, agua de melisa, cápsulas y comprimidos.
Nuestro remedio: Fórmula para calmar los estados de irritabilidad y ansiedad leve, que combina a partes iguales melisa, valeriana, espino albar y anís estrellado. Una cucharada sopera de la mezcla por taza. Hervimos 2 minutos, dejamos en reposo y colamos. Lo ideal es tomarlo a pequeños sorbos, durante la jornada.
 
2- Hipérico, un antidepresivo suave
El hipérico Hypericum perforatum L. o hierba de san Juan, como se la conoce en muchos idiomas, por coincidir su floración aproximadamente con esta festividad que inaugura el estío, presenta en sus hojas unas diminutas glándulas, apreciables a contraluz, donde se concentra la esencia. Aparece en márgenes de caminos y herbazales de toda Europa, y la planta en flor se cosecha cuando se encuentra en plena floración. Es el hipérico una planta célebre por sus  virtudes antidepresivas, que ha hecho que se la conozca como el prozac herbario.
Principios activos: Aceite esencial, con alfa-pineno, abundantes taninos, cumarinas, flavonoides como la hiperina, antocianósidos, hiperforina, ácidos clorogénico y caféico, entre otros, y una sustancia líquida de color rojizo, la hipericina, a la que se le atribuye su efecto antidepresivo.
Propiedades: Antidepresivo, tranquilizante, antiespasmódico, astringente, antiinflamatorio, analgésico, colagogo, antiséptico, antiviral, cicatrizante.
A quien conviene: Para tratar estados depresivos incipientes o leves, los ataques de ansiedad, la irritabilidad nerviosa, las arritmias y los terrores nocturnos, asi como los trastornos neurovegetativos vinculados al climaterio. La hipericina inhibe la recaptación de la serotonina, un neurotransmisor cerebral que se vincula con los estados de humor, e inhibe también la acción de la monoamino-oxidasa, una enzima capaz de destruir la serotonina y otras sustancias químicas de nuestro cerebro y provocar una disfunción en nuestro comportamiento. Al anular el efecto de esta enzima se consigue aumentar nuestra sensación de bienestar y nuestra autoestima. El hipérico se muestra eficaz para aliviar la tensión premenstrual y los espasmos, y en uso externo, se aplica sobre quemaduras, llagas, úlceras, contusiones, neuralgias y dolores articulares.
Precauciones: No simultanear con tratamientos antidepresivos, con los que podría mostrar interacciones indeseadas. Evitar durante el embarazo y la lactancia. Rehuir la exposición solar tras la toma de hipérico, para no vernos afectados por su efecto fotosensibilizante.
Formas de presentación: En extracto líquido, presentado en ampollas, perlas o frascos, en dosis establecidas por un facultativo. En cápsulas y comprimidos, y la planta seca para infusión. Oleato de hipérico para uso externo.
Nuestro remedio: Fórmula antidepresiva que combina a partes iguales hipérico, melisa, espino albar y flores de azahar. Una cucharada sopera de la mezcla por taza. Echar el agua sobre las hierbas depositadas en la tetera y dejar en reposo 6-7 minutos. Filtrar y añadirle una pizca de miel o zumo de limón, y tomarlo dos veces al día, en ayunas.
 
3- Lúpulo, para dormir mejor
Planta enredadera, propia de riberas, setos y márgenes de bosques húmedos, el lúpulo Humulus lupulus L. es uno de los grandes recursos herbarios para combatir el insomnio. Se utilizan los frutos en forma de conos o estróbilos, y una sustancia que contienen, la lupulina, y que se desprende con solo agitarlos vivamente. Con la lupulina se aromatiza la cerveza y se obtiene un tinte amarillo. Los frutos del lúpulo maduran en otoño.
Principios activos: Lupulina, lupulona, humulona, aceite esencial, flavonoides, ácidos fenoles, taninos, aminas, resinas.
Propiedades: Sedante, hipnótico, antiespasmódico, analgésico, anafrodisiaco, digestivo, aperitivo, antiséptico.
A quien conviene: Este pariente del cannabis es uno de los mejores remedios contra el insomnio. Muestra un intenso efecto sedante muy útil para aquellas personas que padecen episodios de insomnio de forma reiterada, que les cuesta desconectar de las preocupaciones de la jornada y que día tras día no consiguen conciliar el sueño de una forma normal. Los remedios con lúpulo proporcionan un sueño reparador, calman la tensión nerviosa y alivian la presión muscular. Resultan eficaces también para combatir las jaquecas nerviosas, las arritmias y los estados de pánico. El lúpulo se recomienda para aliviar los trastornos de origen nervioso que padecen muchas mujeres en el climaterio, como estados leves de ansiedad, irritabilidad, neuralgias, migrañas y taquicardias. Y como analgésico, reduce el dolor muscular, o el producido por contusiones, torceduras, golpes e inflamaciones articulares.
Precauciones: No tomar en el embarazo y la lactancia y evitar dosis altas y continuadas. La lupulina una vez seca pierde parte o todo su potencial medicinal, por lo que debe usarse cuando aún es fresco.
Formas de aplicación: En infusión, hasta tres vasos al día, en maceración, tintura, extracto líquido, lupulina fresca (200-300 mg por toma), cápsulas, comprimidos, la planta seca para rellenar cojines, y la infusión para compresas o baños.
Nuestro remedio: Para vencer el insomnio, la fórmula magistral que combina a partes iguales lúpulo, pasiflora, lavanda y amapola. Una cucharada sopera rasa de la mezcla por taza de agua. Hervir 2 minutos, dejar 10 en reposo y colar. Añadir un poco de zumo de limón y tomar hasta tres vasos al día, el último una media hora antes de acostarse.
 
4- Amapola de California, para la jaqueca por nervios
Originaria de Norteamérica, la bellísima amapola de California Eschscholzia californica Cham. es una planta muy conocida y apreciada por los jardineros y aficionados a la jardinería del mundo entero. Las poblaciones nativas utilizaban la amapola, convertida en polvo o bien la salvia, para combatir el dolor de muelas, pero también para aliviar úlceras y heridas cutáneas. Y se cuenta que las mujeres indias se valían de una pócima preparada con los polvos de esta hierba para tratar de encandilar al hombre que no cedía a sus encantos.  
Principios activos: Diferentes alcaloides como berberina, californidina, quelidonina, heterósidos cianogénicos, flavonoides.
Propiedades: Sedante, hipnótica, sedante cardiaco, antiespasmódica, analgésica.
A quien conviene: A personas afectadas de insomnio puntual o crónico. Aporta un sueño plácido y reparador. Alivia las arritmias y taquicardias y se muestra muy útil para tratar la hipertensión arterial atribuible, cuando es posible, a circunstancias nerviosas. Está indicada también en estados de ansiedad leve, irritabilidad nerviosa y estrés. Combate la migraña, el dolor producido por neuralgias, lumbalgias, ciática y reumatismos, asi como los dolores asociados a la menstruación.
Precauciones: Por su contenido en alcaloides, evitar en el embarazo, la lactancia y no administrar a niños menores de 10 años.
Formas de aplicación: En infusión, combinada con otras plantas sedantes, hasta 3 tazas al día, en jarabe, tintura, extracto líquido y cápsulas (de 1 a 3 al día).
Nuestro remedio: Para aliviar la migraña, recomendamos la fórmula que asocia la amapola de California con tila, flor de azahar y anís estrellado, dos cucharadas soperas por medio litro de agua. Se hierve apenas un minuto y se deja reposar de 5 a 10 minutos. La infusión toma un color muy oscuro que no ha de espantarnos. Podemos añadirle miel de azahar, para mejorar el sabor y reforzar su acción.
 
5- Valeriana, el mejor tranquilizante
Común en prados, riberas y márgenes de bosques húmedos, en áreas de montaña, la valeriana Valeriana officinalis L. es la reina de las plantas tranquilizantes. Es en la cepa y en la raíz donde se atesoran sus propiedades medicinales. Se cosechan desde finales del verano y en otoño, y para cubrir la demanda de esta planta, se cultiva en viveros y plantíos.
Principios activos: Aceite esencial con iso-valerianato de bornilo, ésteres (valepotriatos), ácidos butírico, acético y fórmico, alcaloides.
Propiedades: Tranquilizante, relajante muscular, antiespasmódica, hipnótica, anticonvulsiva, hipotensora, reequilibrador nervioso.
A quien conviene: Es la planta ideal para hacer frente a todo tipo de estados de tensión nerviosa, como es la producida por exámenes, oposiciones o compromisos profesionales, la tensión por dificultades económicas o disputas familiares. Calma los estados de ansiedad leve, la irritabilidad y la taquicardia. Ayuda a conciliar el sueño y a controlar la tensión sanguínea. No es menos útil para relajar los músculos, aliviar la migraña, los espasmos gastrointestinales y la tensión menstrual y premenstrual. Se ha indicado en el tratamiento de convulsiones nerviosas y epilepsias.
Precauciones: No se debe tomar valeriana por periodos prolongados, superiores a los 8-10 días. Tampoco se recomienda tomarla inmediatamente antes de acostarnos, sino que es preferible hacerlo al menos una hora antes. Evitar el aceite esencial por vía oral en el embarazo y la lactancia, asi como para niños menores de 6 años.
Formas de aplicación: En cápsulas (hasta 3 al día), en tintura, extracto líquido, jugo fresco del rizoma y en decocción, combinada con hierbas de sabor más grato.
Nuestro remedio: Para combatir los nervios, tintura de valeriana, hasta 20 gotas, disueltas en zumo de fruta o en agua, tres veces al día.
 
6- Angélica, para la hipertensión nerviosa
La angélica Angelica archangelica L. es una planta umbelífera de gran tamaño, hasta 2 metros de alto en algunos casos, que crece en prados húmedos, pastizales y pantanos. Es común en buena parte de Europa, pero no está presente en la Península, donde si es frecuente la Angélica silvestre, de menor importancia fitoterapéutica. Se recolecta no sólo el fruto, para aprovecharnos de las semillas, sino también la raíz, que se arranca antes de que la planta florezca.
Principios activos: Aceite esencial, cumarinas (umbeliferona, angelicina, arcangelicina), ácidos fenoles, taninos, sacarosa.
Propiedades: Sedante, antiespasmódica, digestiva, carminativa, antimicrobiana, vasodilatadora, antiinflamatoria, antirreumática, antineurálgica.
A quien conviene: A personas a quienes les sienta mal la comida a causa de los nervios y el estrés, para combatir la acidez estomacal y los espasmos gastrointestinales, asi como los gases y la hinchazón provocada también por un exceso de nervios. La angélica se indica igualmente para calmar los estados de irritabilidad e hiperactividad, para ayudar a conciliar el sueño, y aliviar las migrañas nerviosas, los dolores musculares y neurálgicos, los dolores reumáticos y menstruales. Es un apoyo para las personas hipertensas.
Precauciones: No tomar el aceite esencial por vía oral. La planta fresca es fotosensibilizante, procurar no exponerse al sol tras una aplicación tópica, y en algunos casos la planta seca puede ocasionar irritación en la piel.
Formas de presentación: En decocción o infusión, en extracto líquido, tintura, polvos, cápsulas y decocción para baños y friegas.
Nuestro remedio: Fórmula para bajar la tensión arterial, que combina angélica con tila, cola de caballo, abedul e hinojo, a partes iguales. Una cucharada sopera rasa de la mezcla por taza. Hervir 2-3 minutos, dejar en reposo y colar. Tomar una o dos tazas al día.
 
7- Naranjo amargo, para acabar con la irritación nerviosa
Las naranjas tienen su origen en el sudeste de Asia, y entraron en Europa, por España, hacia el siglo X, traídas por los árabes. Las naranjas se consideran en China un símbolo de buena fortuna y en Vietnam es costumbre obsequiar a los recién casados con un cesto repleto de ellas. El nombre de naranja puede derivar del vocablo en sánscrito nagarunga, del persa arangus o del árabe naranche. De las dos variedades de naranja, la dulce se destina básicamente a la alimentación, y la amarga Citrus aurantium var. amara Link,  a la obtención de aceites esenciales, en aplicaciones de aromaterapia, en perfumería, cosmética y para la elaboración de licores y ratafías. Con fines medicinales se aprovechan las flores -flores del azahar-, los frutos inmaduros y en menor medida las hojas.
Principios activos: Aceite esencial con nerol, linalol, limoneno, flavonoides (hesperidósido, hesperidina), pectina, ácidos cítrico, ascórbico y málico, sales minerales.
Propiedades: Sedante, relajante muscular, hipnótico, vitamínico, remineralizante, digestivo, hipocolesterolemiante, corrector de sabor.
A quien conviene: Dejando a parte las numerosas virtudes nutritivas de la naranja, cabe aquí resaltar el valor de las flores de azahar como tranquilizante, sea en remedios de herbolario o en aplicaciones aromaterapéuticas, para calmar los nervios, combatir las alteraciones digestivas y los espasmos gastrointestinales, la sensación de mareo, los ataques leves de ansiedad, los episodios de irritabilidad acusada y el insomnio. Las flores de azahar se incluyen además a numerosas formulaciones herbarias para mejorar su sabor.
Precauciones: Evitar el aceite esencial por vía interna durante el embarazo, la lactancia y en niños menores de seis años, asi como a pacientes con gastritis y úlcera gastroduodenal.
Formas de aplicación: Infusión de flores y hojas (hasta 3 tazas al día), jarabe, extracto líquido, tintura, el aceite esencial en aromaterapia.
Nuestro remedio: Para evitar los espasmos gastrointestinales de origen nervioso, combinamos las flores de azahar con verbena, pasiflora y melisa, a partes iguales. Una cucharada sopera de la mezcla por taza. Vertemos el agua hervida sobre las hierbas ya mezcladas, dejamos que repose unos 8-10 minutos y tomamos hasta tres tazas al día, tras las comidas principales.
 
 
8- Otras plantas útiles:
-- Cuernecillo, para la depresión leve y las taquicardas, en infusión, extracto o tintura.
-- Tilo, para la tensión alta, las palpitaciones nerviosas y la jaqueca, en infusión.
-- Amapola, en infusión, para el insomnio, la tos nerviosa, en infusión, extracto líquido y tintura.
-- Verbena, para la migraña nerviosa, en infusión y tintura
-- Piscidia, para el insomnio y la ansiedad, en cápsulas, tintura y en infusión.
-- Mejorana, para la jaqueca nerviosa, en infusión, tintura y extracto líquido.
-- Manzanilla, para indigestiones por nervios, en infusión
 
9- Aromaterapia, aceites esenciales de mejorana, bergamota, naranjo amargo, melisa, menta, lavanda, manzanilla, vetiver, valeriana, albahaca, sándalo.
 
 
 
 
PLANTAS DIURÉTICAS Y ADELGAZANTES
 
Muy amplia es la gama de plantas con efectos diuréticos que podemos encontrar en un herbolario. Sus funciones básicas son, claro está, estimular la emisión de orina, tonificar el riñón y aliviar los diferentes trastornos que le afectan, como la inflamación del órgano, el cólico nefrítico -un cuadro muy doloroso con espasmos-, la pielonefritis o inflamación de los tejidos del riñón, la formación de piedras o arenillas, los edemas y las infecciones en el tracto urinario, entre otros. Algunas plantas actúan como unos antisépticos urinarios tan o más eficaces que los antibióticos clínicos, y pueden ser muy adecuadas en caso de afecciones tan frecuentes como la cistitis o la uretritis, pero entonces será recomendable reforzar su acción con un diurético, para ayudar a limpiar los riñones y a reducir el riesgo de infección. Los edemas pueden estar desencadenados por inflamaciones renales, pero también pueden estar vinculados a la obstrucción de los vasos linfáticos o al aumento de la permeabilidad de las paredes vasculares, asi como a cambios hormonales y al embarazo. Cuando el edema es general se llama hidropesía. En ambos casos es preciso contar con control médico antes de iniciar un tratamiento. También es un edema la retención de líquidos, una dolencia que afecta a mucha gente, especialmente mujeres, y que se manifiesta con piernas y tobillos hinchados. En este caso se imponen determinadas recomendaciones dietéticas, como beber mucha agua, caminar a paso presto, mantener un peso saludable y moderar la ingesta de sodio, entre otras, y recurrir a las plantas como apoyo para eliminar líquido y evitar el sobrepeso que provoca la retención. Como adelgazantes, las plantas diuréticas no son recomendables, porque nos hacen perder agua y minerales, pero no los excesos de grasa acumulada, lo cual es un riesgo. En tal caso, los tratamientos herbarios para ayudar a adelgazar se basan en plantas con efectos saciantes, como determinadas algas -fucus, laminaria-, plantas reguladoras del apetito como la garcinia o lipolíticas como el naranjo amargo y el té verde, pero sobre la eficacia de estas últimas existe una encendida controversia.
 
1- Diente de león, aliado del riñón
Planta muy común y cosmopolita, el diente de león Taraxacum officinale Weber. se llama asi por la forma muy dentada de sus hojas, que se comen en ensalada. El término genérico de su denominación científica procede del vocablo griego taraxis, que significa curador de molestias. En la Edad Media los boticarios centroeuropeos elaboraban zumos de diente de león a partir de las raíces y las hojas, como remedio contra intoxicaciones y desórdenes renales. Con fines medicinales se cosechan la raíz, en otoño, y las hojas, en primavera.
Principios activos: Inulina, principios amargos, triterpenos (taraxasterol, faradiol), fitosteroles, cumarinas, mucílagos y abundantes sales minerales.
Propiedades: Diurético, depurativo renal y hepático, desintoxicante, colerético, aperitivo, digestivo, dermoprotector, protector del tejido conjuntivo.
A quien conviene: El diente de león es un excelente depurador hepático y renal, que será de gran utilidad para aquellas personas aquejadas de cálculos biliares y renales, para combatir los edemas, la retención de líquidos y la inflamación del tejido renal. Ayuda a orinar sin problemas y favorece la eliminación de toxinas por esa vía. Debe ser tenido en cuenta por quienes padecen de gota y de dolores reumáticos crónicos, por cuanto contribuye a moderar los exceso de ácido úrico en sangre y orina. Se aplica igualmente en inflamaciones de los conductos urinarios, como la cistitis. Como tónico digestivo, estimula el apetito y alivia las indigestiones, empaches e intoxicaciones alimentarias. En uso externo, se aplica como depurativo sobre impurezas de la piel, como eccemas y urticarias.
Precauciones: Puede provocar molestias gástricas y acidez. Evitar en caso de obstrucción de las vias biliares.
Formas de presentación: En decocción de la raiz e infusión de las hojas, jugo de la raíz, tintura, extracto líquido, cápsulas y comprimidos.
Nuestro remedio: Para facilitar la eliminación de residuos metabólicos (urea, ácido úrico), combinamos diente de león con lespedeza, ortosifón, coronilla de fraile y anís verde, a partes iguales. Una cucharada sopera rasa de la mezcla por taza de agua. Hervimos 2-3 minutos, dejamos en reposo y colamos. Tomar hasta 3 vasos al día, al que se puede añadir un poco de zumo de limón para mejorar el sabor.
 
2- Abedul, reductor de la tensión alta
Bello árbol de ramas colgantes y corteza blanca, el abedul Betula pendula L. (y B. alba) crece en claros de bosques de pinos o hayas y en terrenos afectados por aludes, en áreas montañosas de Europa y Asia. Se cosechan las hojas y los brotes, pero también la savia y la corteza.
Principios activos: Aceite esencial, ácido betulínico, betulinol, flavonoides (hiperósido), sales potásicas, ácido ascórbico, taninos.
Propiedades: Diurético, depurativo, antiséptico, antibacteriano, analgésico, antiinflamatorio, febrífugo, cicatrizante.
A quien conviene: Las hojas del abedul se revelan como un remedio diurético de primer orden, que tiene a su favor el que no provoca irritación. Los herbolarios lo incluyen en buena parte de sus fórmulas magistrales para estimular la orina, en problemas de retención de líquidos, oliguria, edemas e hidropesía. Facilita la eliminación de los cálculos renales y previene su formación, combate las infecciones en el tracto urinario y la inflamación del tejido renal y de la vejiga urinaria. Las personas hipertensas pueden contar con el abedul, por ser una poderosa aportación de potasio. Se indica como un recurso para rebajar los excesos de ácido úrico y para combatir los dolores reumáticos y la gota.
Precauciones: En caso de hipertensión, insuficiencia renal y cardiopatías, se debe consultar con el médico antes de usar esta planta.
Formas de presentación: En infusión de las hojas o decocción de la corteza, jugo de la savia, tintura, extracto líquido, jarabe y cápsulas.
Nuestro remedio: Como apoyo para evitar la hipertensión arterial, combinamos hojas de abedul con grama, cola de caballo, barbas de maiz e hinojo. 20 g de cada planta, de las que tomamos 5 g de la mezcla por cada vaso de agua. Hervimos 2-3 minutos, dejamos que repose y filtramos. Edulcoramos con miel y le añadimos una rodaja de limón. Tomamos hasta 3 tazas al día.
 
3- Maíz, freno para la cistitis
El maíz Zea mays L. es el tercer cereal más consumido en el mundo y la base nutricional en la dieta de los pueblos indígenas de América desde muchos siglos antes de que llegasen allí los europeos. Se ha convertido en un pilar básico de la alimentación humana, una fuente de salud por su riqueza en vitaminas y minerales, y un elemento muy versátil en la cocina. Pero a parte de las semillas, la parte de la planta con mayor valor terapéutico son los estigmas o barbas que coronan las mazorcas o infrutescencias.
Principios activos: Sales potásicas, flavonoides (maizina), aceite esencial, taninos, ácido salicílico, ácidos grasos poliinsaturados (oleico, linoléico, palmítico) en las semillas y el aceite que se obtiene de ellas.
Propiedades: Diurético, hipotensor, depurativo, hipoglucemiante, hipolipemiante, antiagregante plaquetario, astringente, demulcente, nutritivo, remineralizante, vitamínico.
A quien conviene: Se ha calculado que más de la mitad de las mujeres de los paises occidentales padecen alguna vez, si no de forma recurrente, de cistitis o inflamación de la vejiga, una patología que se ceba mucho más en ellas que en ellos. Los remedios con maíz pueden ser una solución a tener en cuenta. Se indican también para rebajar la inflamación del riñón, para estimular la orina y combatir los cálculos renales, los edemas, la retención de líquidos y los excesos de ácido úrico y urea, con sus consecuencias, como la gota y el dolor articular. Como diurético, las barbas de maiz se integran en formulaciones para bajar la tensión sanguínea, para frenar la acumulación de grasa en las arterias y en tratamientos de apoyo para diabéticos.
Precauciones: En caso de hipertensión, insuficiencia renal o cardiaca, debe contarse con control médico.
Formas de presentación: En extractos líquidos (entre 15 y 30 gotas en tres tomas diarias), en infusiones combinadas (hasta 3 vasos al día), en tintura, jarabe y el aceite de maíz y las semillas crudas o cocidas.
Nuestro remedio: Para aliviar la cistitis, combinamos cantidades de 20 g de estigmas de maíz, hojas de gayuba, rabo de gato y malva. Una cucharada sopera de la mezcla por taza. Hervimos 2-3 minutos, dejamos reposar y filtramos. Endulzamos con miel y bebemos hasta 3 vasos diarios, acompañando de un consumo generoso de agua.
 
4- Vellosilla, enemiga de la gota
La modesta vellosilla, pilosella o pelosilla Hieracium pilosella L. también se conoce en algunos lugares como hierba de la salud, lo que explica su fama de planta medicinal. Es propia de colinas, prados y claros de bosque, y de ella se cosechan en primavera los capítulos florales y las hojas, y al final del estío, la raíz. Es una planta que cuenta con gran estima por parte de los herbolarios centroeuropeos, que le atribuyen un sinfín de virtudes curativas.
Principios activos: Ácidos fenólicos, flavonoides, cumarinas, umbeliferona, principios amargos, mucílagos, taninos, inulina (en la raiz).
Propiedades: Diurética, azotúrica, antiséptica, antibiótica, astringente, antidiarreica, depurativa, antiedematosa, anticatarral, antipirética, demulcente, vermífuga.
A quien conviene: Los problemas por un exceso de ácido úrico y una de sus consecuencias, la gota, supone para quien lo sufre una fuente de dolor, que algunas veces se hace difícil de soportar. Los depósitos de uratos originan tumefacciones allí donde se acumulan y conforme la enfermedad avanza, puede generar rigidez y un dolor intenso en las articulaciones. Los herbolarios prescriben esta planta tradicional para tratar de aliviar estos dolores y frenar el exceso de ácido úrico. El ácido úrico se elimina por el riñón y con la orina. Esta planta diurética facilita esta eliminación, y se muestra igualmente eficaz para prevenir o aliviar los edemas, la retención de líquidos y la infección en los conductos urinarios. Se indica también en caso de hipertensión de origen renal, colesterol alto y para prevenir accidentes vasculares.
Precauciones: Nuevamente, se aconseja contar con médico en caso de hipertensión, insuficiencia renal o cardiaca a fin de evitar peligrosas descompensaciones.
Formas de presentación: En infusión de las hojas y flores o decocción de la raíz (2-3 tazas diarias), en extracto líquido, tintura y cápsulas.
Nuestro remedio: 3 cápsulas diarias, antes de las comidas, para aliviar la gota. O bien la infusión de vellosilla, fresno, malvavisco y anís verde, a tomar tres tazas al día, en ayunas.
 
5- Vara de oro, el mejor depurativo renal
Es tan espectacular como una rama de oro macizo, y éste es el significado exacto de la denominación científica de esta bella planta de montaña, la vara de oro Solidago virgaurea L. Cuando está en plena floración, exhibiendo sus alargados racimos de capítulos dorados, ofrece este aspecto, y así es reconocida por los herbolarios, que la vienen utilizando desde la antigüedad por sus propiedades diuréticas y astringentes. Se cosechan las sumidades floridas, a mediados del verano, cuando están en plena floración.
Principios activos: Flavonoides (hiperósido, rutósido), cumarinas, ácidos fenólicos, saponósidos triterpénicos (virgaureagenósido), ácido esencial.
Propiedades: Diurética, antiséptica, antibacteriana, tónico venoso, antiinflamatoria, astringente, hipotensora, sedante.
A quien conviene: La vara de oro es un depurativo tradicional, que cuenta con una gran aceptación entre los herbolarios europeos. Diversos estudios clínicos han refrendado muchas de sus aplicaciones populares. Favorece la expulsión de los materiales de desecho a través del riñón y por la orina, reduce la inflamación renal y combate las infecciones localizadas en el tracto urinario. Es muy eficaz contra los edemas, la retención de líquidos, los excesos de urea y ácido úrico, la gota y la hipertensión arterial vinculada a un problema renal. Se ha usado también como depurativo en el tratamiento de alteraciones dermatológicas y trastornos reumáticos. Proporciona alivio en piernas y pies pesados e hinchados, y se aplica sobre venas varicosas y hemorroides.
Precauciones: Lo ya dicho en las plantas anteriores.
Formas de presentación: En infusión combinada, hasta tres tazas al día, en tintura, polvos o cápsulas y el extracto líquido.
Nuestro remedio: Para tratar los ataques de gota, podemos probar la fórmula que asocia vara de oro con brecina, abedul, lespedeza e hinojo. Necesitamos 4 cucharadas soperas de la mezcla por litro de agua. Hervimos un par de minutos y dejamos que repose tapado unos 10 más. Colamos bien y podemos ir bebiendo a pequeñas dosis durante toda la jornada.
 
6- Fucus, una ayuda para comer menos
El fucus Fucus vesiculosus L. es una alga parda, muy abundante en las costas del Atlántico norte y presente también en las costas cantábricas, donde llega a formar densas masas algosas adosadas al fondo marino. Se cosechan a nivel industrial, utilizando pequeñas barcazas, provistas de unos dispositivos que las cortan y las izan a bordo. El fucus se ha convertido en uno de los principales elementos dietéticos para adelgazar.
Principios activos: Ácido algínico, sales minerales (iodo en abundancia, potasio, bromo, magnesio, calcio y sílice), polisacáridos mucilaginosos (algina, laminarina), manitol, principios amargos, vitaminas A,B, C y E.
Propiedades: Adelgazante, diurético, laxante, remineralizante, vitamínico, demulcente, hemostático local, hipolipemiante, hipocolesterolemiante.
A quien conviene: Los mucílagos que contiene esta alga tienen la particularidad de que al contacto con el agua, llegan a retener cien veces su peso en agua -por un aumento de la algina-, lo cual, a quien lo toma, le produce una inmediata sensación de saciedad, que no invita a seguir comiendo. Los remedios dietéticos con fucus se destinan principalmente a personas a las que les cuesta resistirse a la comida y que presentan problemas serios de sobrepeso o incluso de obesidad. La algina actúa además como un protector de las mucosas digestivas y muestra una acción laxante. Es el fucus además una fuente privilegiada de iodo, un oligoelemento necesario para la formación de las hormonas tiroideas. Asegurando un aporte de iodo, estimulamos el funcionamiento de la tiroides y los procesos catabólicos del organismo, aumentando el consumo de calorías, por ello se indica esta alga en tratamientos de apoyo para perder peso.
Precauciones: No se debe simultanear con tratamientos con hormonas tiroideas, y no se recomienda en caso de existir cardiopatías, hipertensión, ansiedad e insomnio. Y en cualquier caso se aconseja no usar sin prescripción médica.
Formas de aplicación: Extracto líquido, planta seca para decocción, jarabe, tintura, viales, cápsulas y comprimidos.
Nuestro remedio: Como apoyo para perder peso, tomar entre 10 a 20 gotas de extracto líquido de fucus, mezcladas en el zumo de limón o el vaso de agua, de 1 a 3 veces al día.
 
7- Garcinia, para perder el apetito
Los extractos obtenidos de la pulpa del tamarindo malabar Garcinia cambogia L. constituyen uno de los recursos estrella de la medicina natural para enfrentarse a los problemas de obesidad y sobrepeso.
Principios activos: Ácido hidroxicítrico, antocianósidos.
Propiedades: Adelgazante, digestiva, aperitiva, astringente, antibacteriana.
A quien conviene: El ácido hidroxicítrico es una sustancia capaz de bloquear la transformación de los carbohidratos en ácidos grasos. La intervención de este ácido se traduce en un incremento de la producción y almacenamiento de glucógeno, presente en el hígado y los intestinos, a la vez que reduce el apetito y la ganancia de peso. La garcinia no incide sobre el sistema nervioso, y por tanto no provoca ansiedad o insomnio. Se trata de un recurso herbario interesante para acompañar los tratamientos dietéticos para perder peso, asi como en las dietas de los deportistas.
Precauciones: No tomar esta planta sin asesoramiento adecuado
Formas de aplicación: En cápsulas, jarabe y crema lipolítica.
Nuestro remedio: Dos cápsulas al día, una media hora antes de comida y cena.
 
8- Otras plantas útiles:
-- Gatuña, para trastornos urinarios, hiperuricemia, hipertensión, en infusión, extracto líquido y tintura.
-- Galio, para los edemas, la retención de líquidos y los trastornos urinarios, en infusión.
-- Enebro, para la nefritis, cálculos renales, hipertensión, en infusión, tintura, extractos.
-- Frambueso, para los cálculos renales, en infusión de hojas, extracto líquido.
-- Arenaria roja, para la hipertensión arterial, edemas y oliguria, en infusión.
-- Apio, para la gota y el dolor reumático, en caldo, jugo de planta fresca, infusión y tintura.
-- Ortosifón, para las infecciones urinarias, prostatitis, hipertensión, en extracto fluido y cápsulas.
-- Mijo del sol, para la gota, reumatismos y edemas, en infusión, extractos y tintura.
-- Grama, para las afecciones urinarias, hipertensión, en decocción, tintura y extracto.
-- Brecina, para las infecciones urinarias, en infusión, extracto y tintura.
-- Otras: cola de caballo, borraja, lespedeza, gayuba, hierba de las siete sangrías, glucomanano, achicoria, bolsa de pastor, esparraguera, fumaria y eupatorio.
  
9- Aromaterapia, aceites esenciales de enebro, sándalo, incienso, bergamota, perejil, apio, tomillo, aplicados en masajes y baños locales.
 
 
 
PLANTAS PARA LA PIEL
 
Mantener la piel sana no es sólo una cuestión estética, es sobre todo un imperativo de salud y bienestar. La piel nos protege contra el calor y el frío, de las agresiones del exterior en forma de infecciones, en ella se concentran miles de terminaciones nerviosas, que transmiten sus mensaje de placer o dolor a todos los órganos de nuestro cuerpo. Su capacidad para resistir las agresiones del ambiente depende en buena medida de la salud general de nuestro organismo. Quemaduras solares, escaldaduras, desgarros, arañazos, llagas, eccemas, granos, urticarias, verrugas, herpes y otras infecciones víricas, asi como procesos de desgaste vinculados al paso del tiempo, como resecamiento de la piel, aparición de grietas o arrugas, etc, son trastornos dermatológicos que pueden ser afrontados con mayor o menor eficacia con la ayuda de remedios herbarios. La afición por los baños de sol, que lleva a miles de personas a abarrotar las playas en verano, puede tener unas consecuencias muy graves para nuestra piel si no nos protegemos de manera adecuada y si además se toman de una forma excesiva. Más grave aún es la exposición al sol sin estar protegidos en paisajes de alta montaña. Las consecuencias inmediatas todos las conocemos, una hinchazón dolorosa o un enrojecimiento de la zona afectada con eritema, y en casos graves la descamación de la piel. Muchas plantas con efectos antiinflamatorios, hidratantes, refrescantes y cicatrizantes pueden aportarnos una solución de urgencia en estos casos. Contamos también con plantas que suman una acción antihistamínica, que nos pueden proteger de las picaduras de insectos y proporcionarnos alivio si hemos caído víctimas de ellas. Magulladuras y heridas leves por caídas o impactos accidentales cuando estamos de excursión o practicando deporte pueden aliviarse con cremas a base de plantas antiinflamatorias y analgésicas. Problemas de mayor alcance, asociados a veces a  cambios hormonales, como el acné, se pueden tratar con plantas depurativas, y las infecciones víricas, como verrugas y eccemas, los forúnculos o infección de las glándulas sebáceas y los hongos, como el pie de atleta, responden bien al tratamiento con hierbas antisépticas, antivíricas y antifúngicas, pero requerirán plazos más o menos largos de aplicación. Aquí hemos seleccionado cuatro de las más eficaces, dentro de un abanico amplio de posibilidades.
 
  
1- Cola de caballo, para revitalizar la piel
Emparentada con los helechos, la cola de caballo Equisetum arvense L. es como aquéllos un indicador de humedad, que crece en prados húmedos y riberas. Presenta un tallo fértil, que aparece en primavera, sustituido en verano por un tallo estéril, que recuerda un pino enano, y que es la parte cosechada con fines medicinales. La cola de caballo es una de esas hierbas insustituibles en cualquier herbolario, que se incorpora a una amplia gama de formulaciones y remedios.
Principios activos: Abundantes sales minerales (sílice, potasio, magnesio), flavonoides, ácidos fenólicos, saponinas (equisetonina), alcaloides (nicotina, espermidina), ácidos cafeico y equisetólido, vitamina C.
Propiedades: Diurética, remineralizante, antianémica, depurativa, dermoprotectora, cicatrizante, astringente, hemostática, antihemorrágica.
A quien conviene: La cola de caballo es una planta con múltiples usos, que los herbolarios recomiendan como remineralizante para tratar estados de debilidad y anemia, asi como para reforzar la masa ósea y prevenir fracturas y la osteoporosis, para aliviar el dolor reumático, las inflamaciones genitourinarias y las menstruaciones excesivas. Pero en aplicación tópica esta modesta planta se muestra muy activa para facilitar la curación de heridas y llagas de la piel, para disminuir la presencia de estrías y manchas y retrasar el envejecimiento de la epidermis. No es menos útil sobre eccemas, forúnculos y hongos. Se usa igualmente para revitalizar el cabello y para cortar la inflamación y el sangrado bucal, asi como en conjuntivitis y blefaritis.
Precauciones: La cola de caballo, por contener alcaloides muy activos, debe ser evitado en el embarazo y la lactancia, y por pacientes con gastritis y úlcera gastroduodenal.
Formas de aplicación: El jugo de la planta fresca, en tintura, infusión, cápsulas y comprimidos.
Nuestro remedio: Infusión depurativa, para combatir la presencia de granos y hongos, que combina a partes iguales cola de caballo con bardana, calaguala y zarzaparrilla. Se precisa una cucharada sopera rasa de la mezcla por vaso de agua. Se hierve apenas dos minutos y se mantiene otros 10 en reposo, Se debe tomar una primera taza en ayunas y la segunda un par de horas antes de acostarnos.
 
2- Borraja, para frenar las arrugas
Muy presente en la tradición popular, con la hojas y flores de la borraja Borago officinalis L, bañadas en vino, se preparaban unas pócimas a las que se atribuía la facultad de confortar el espíritu y disipar la melancolía. Se ha consumido desde antiguo como verdura y en ensalada. Con las hojas se preparan deliciosos buñuelos y con las flores se decoran pasteles. La borraja es una planta mediterránea, muy común en márgenes de caminos y sembrados, que florece ya desde mediados del invierno y de la que se cosechan las flores, las hojas y las semillas, para la obtención del aceite de borraja
Principios activos: Abundantes sales minerales (calcio, potasio, sílice), mucílagos, antocianósidos, alantoína, alcaloides pirrolizidínicos, ácido silícico, taninos, ácidos grasos poliinsaturados en la semillas (oleico, linoléico, gammalinolénico).
Propiedades: Diurética, depurativa, hipotensora, sudorífica, antiinflamatoria, demulcente, emoliente, antirreumática, hipocolesterolemiante, emenagoga.
A quien conviene: La ubicua borraja es una planta muy versátil, de la que se derivan numerosas aplicaciones. Las flores se toman en infusión para aliviar las diferentes afecciones respiratorias. Pero aquí nos interesa el aceite, que por presión en frío, se obtiene de sus semillas. En uso externo está especialmente indicado sobre pieles resecas, envejecidas y dañadas, por su capacidad revitalizante y emoliente. Combate la irritación, las arrugas, asi como las dermatitis seborreicas, los eccemas, los forúnculos y el daño provocado por las picaduras de insectos. El aceite bebido se prescribe en trastornos de tipo hormonal, los propios de la menopausia y para calmar el dolor artrítico y artrósico.
Precauciones: Los remedios con flores de borraja no se recomiendan a embarazadas y lactantes.
Formas de presentación: Infusión de flores y hojas, hasta 3 tazas diarias, en tintura, extracto líquido, el aceite de semillas en perlas de gelatina, y las hojas en cataplasmas.
Nuestro remedio: Como fórmula tonificante, para mediar en pieles irritadas o prematuramente envejecidas, nos ayudarán las compresas que prepararemos con la infusión combinada de borraja, caléndula, centella asiática y manzanilla. Tomamos dos cucharadas soperas de la mezcla por vaso de agua y hervimos dos minutos. Dejamos diez más en reposo y filtramos. Empapamos las compresas con la infusión y aplicamos, dos veces al día, sobre la piel afectada, manteniéndolas firmes y sujetas durante unos minutos para que hagan efecto.
 
3- Bardana, enemiga del acné
Las enormes hojas basales de la bardana delatan su presencia en los márgenes de bosques y los prados húmedos donde crece. Conocida también por lampazo mayor, su denominación científica Arctium lappa L. procede del vocablo griego arctos por oso y lappa por agarrar, en alusión quizás a la rudeza de sus brácteas espinosas, que con facilidad se te quedan adheridas a la ropa al pasar. Se usa también la muy similar bardana menor A. minus Bernh, mucho más extendida en nuestro país, de la que se cosechan las raices cuando llega el otoño.
Principios activos: Inulina en abundancia, mucílagos, ácidos fenólicos, lactonas sesquiterpénicas, fitosteroles, arctinol, arctinal, aceite esencial, taninos, sales potásicas.
Propiedades: Depurativa, diurética, antibacteriana, dermoprotectora, emoliente, cicatrizante, astringente, hipoglucemiante, digestiva, aperitiva.
A quien conviene: La bardana destaca como un excelente depurativo natural, que tradicionalmente se tomaba en curas de primavera, para propiciar la expulsión de toxinas del organismo. Se revela como un gran aliado de la piel, por cuanto contribuye a acelerar la desaparición de aquellas muestras de toxicidad que se marcan en la piel, como los granos, los eccemas, forúnculos, dermatitis seborreicas y hongos. Es una planta interesante para los adolescentes, muy preocupados por el estigma del acné, al contribuir a su reducción en tratamientos prolongados. Como planta diurética, está indica también en trastornos urinarios, hipertensión y excesos de ácido úrico y urea, combinada con otras plantas que refuercen su acción.
Precauciones: Las habituales usada como diurético en caso de hipertensión e insuficiencias renales o cardiacas.
Formas de presentación: Raiz seca para decocción, hasta 3 vasos diarios, en tintura, extracto líquido, cápsulas o polvos sueltos, y para uso externo, en decocción para friegas, baños locales y colutorios, como ingrediente de cremas o pomadas y el oleato de bardana.
Nuestro remedio: Fórmula para tratar de poner freno al acné, que combina a partes iguales raíz de bardana con zarzaparrilla Smilax medica, corteza de guayaco Guaiacum officinale y raíz de diente de león. Una cucharada sopera rasa de la mezcla por vaso de agua. Se hierve unos 5 minutos y se deja 10 en reposo. Se debe tomar una taza antes de las comidas principales. Como alternativa, se puede preparar 3/4 de l por 3 cucharadas de la fórmula y tomar durante el día para ayudar a depurar la sangre.
 
4- Pensamiento, barrera a las impurezas
El pensamiento Viola tricolor  L. es una planta vastamente usada en jardinería, de la que se han derivado numerosas variaciones cultivables. Pero además se le atribuyen numerosas aplicaciones medicinales. Se empezó a usar en Europa hacia el siglo XVI, para tratar las fiebres palúdicas, especialmente en niños, las convulsiones, ataques epilépticos y el asma. Es común en toda la península, en diversas subespecies. Se cosechan las flores y hojas, en plena floración.
Principios activos: Mucílagos, saponósidos, derivados del ácido salicílico, flavonoides (rutósido), principios amargos, resinas y antocianósidos (violanina).
Propiedades: Dermoprotector, demulcente, diurético, depurativo, antiinflamatorio.
A quien conviene: Esta planta conviene muy especialmente a aquellas personas que se muestran proclives a que les salgan de forma recurrente determinadas impurezas de la piel, como granos, acné, eccemas, infecciones en glándulas sebosas o las provocadas por agentes víricos, bacterianos o micóticos. Se destina igualmente a aliviar los sabañones, las erupciones, llagas y las heridas leves sin sangrado, asi como en conjuntivitis y heridas bucales. El pensamiento se aplica también en casos de gota, hipertensión arterial y afecciones respiratorias.
Precauciones: Ninguna relevante.
Formas de aplicación: En infusión para ser bebida (hasta 3-4 tazas diarias), en extracto líquido, tintura, jarabe, y en infusión para uso externo en compresas, baños, friegas, etc.
Nuestro remedio: Para tratar diferentes afecciones de la piel, como eccemas, forúnculos, sabañones, erupciones cutáneas, urticarias y desgarros, combinamos pensamiento con caléndula, milenrama y ginkgo a partes iguales. Hervimos 3 minutos, tres cucharadas soperas de la mezcla por medio litro de agua. Dejamos en reposo 8 minutos más y filtramos. Con la ayuda de un porroncito o en su defecto, de una botellita de cuello estrecho, regamos cuidadosamente el área afectada con la infusión templada, secando luego sólo de forma somera, para permitir que la humedad permanezca sobre la piel, ejerciendo así su efecto reparador.
 
5- Otras plantas útiles:
-- Caléndula, para quemaduras, escaldaduras, irritaciones, en infusión para uso tópico, cremas y pomadas.
-- Aloe, para quemaduras, eccemas secos y rozaduras, en gel, extracto glicerinado, cremas, pomadas.
-- Malva, para las picaduras de insectos, en infusión para uso tópico y en pomadas
-- Pao d'arco, para quemaduras, infecciones víricas y hongos, en extracto líquido y tintura
-- Sangre de drago, para llagas, quemaduras, aftas bucales, en extracto líquido y la resina
-- Zarzaparrilla, como depurativo contra las impurezas, en decocción
-- Hamamelis, para los sabañones, magulladuras y tumefacciones, en infusión y agua de hamamelis
-- Salvia, para heridas, llagas y la hipersudoración, en infusión para baños y friegas.
-- Fumaria, para las impurezas de la piel, el acné, en infusión y extracto líquido
-- Ajo, para las verrugas, en crudo, el aceite de ajo.
-- Boca de dragón, para heridas y abscesos, en cataplasmas de planta fresca
 
6- Aromaterapia, aceites esenciales de manzanilla, nerolí, pelargonio, mirra, lavanda, patchoulí, melisa, zanahoria, salvia, limón, citronela, milenrama, aplicados en baños y masajes de la zona afectada.
 
 
 
PLANTAS ANALGÉSICAS  
 
El dolor, término de raíz latina con numerosas derivaciones, significa un padecimiento físico, se define también como una sensación de malestar localizada en una parte del cuerpo debida a causas externas o internas, y en el plano de la moral, se relaciona con una aflicción o una pesadumbre. Todos estamos expuestos al dolor desde el momento en que nacemos, y el dolor, por mucho que nos protejamos, nos acompañará, con mayor o menor insistencia, a lo largo de nuestras vidas. El ser humano se ha tratado de defender del dolor desde el principio de los tiempos, y aún hoy los medicamentos para reducir el dolor suponen una buena parte del gasto sanitario. El dolor es la respuesta de alarma que activa nuestro organismo para anunciar que algo no funciona, también es la reacción, en este caso desagradable, a un estímulo nervioso. De dolores físicos podemos enunciar muchos y muy diversos, pero los más corrientes sin duda son los que afectan a la zona lumbar, el dolor de cabeza, el dolor por inflamación de las articulaciones o reumático, como la gota, el dolor vinculado a la tensión menstrual, el dolor relacionado con la digestión y las alteraciones hepáticas, el dolor que provoca la congestión pulmonar y los ataques de tos, el dolor muscular, provocado por sobreesfuerzos y contracturas, y el dolor de muelas, entre otros. Combatir adecuadamente el dolor es una garantía de bienestar y un freno en muchos casos a la desestabilización emocional. Los remedios con plantas medicinales pueden suponer un alivio efectivo a los diferentes tipos de dolor, si éstos no son muy intensos o están vinculados a estadios graves de una enfermedad. Son plantas que aportan sus efectos analgésicos, antiinflamatorios y antiespasmódicos, o que actúan como relajantes musculares, con un abanico de remedios herbarios que se aplican tanto por vía oral como tópica, en forma de baños locales, friegas, masajes o gargarismos. Aquí hemos seleccionado siete de las más solicitadas.
 
1- Sauce blanco, para el dolor lumbar
Es el sauce blanco Salix alba L. un árbol robusto, de hasta 20 metros de alto, que se cría en la orillas de ríos, arroyos y lagos de toda Europa. Con fines medicinales se aprovecha la corteza de las ramas de al menos tres años de edad, que es cosechada en otoño, cuando ya se han caído todas las hojas. En menor medida se utilizan también los amentos y las hojas.
Principios activos: Ácidos salicílico, vainíllico y cafeico, glucósidos (salicina), flavonoides, taninos.
Propiedades: Analgésico, antiinflamatorio, antirreumático, antitérmico, antiespasmódico, antiagregante plaquetario.
A quien conviene: De la salicina o glucósido de saligenina se obtiene por oxidación el aldehído salicílico, del cual deriva el ácido salicílico. De este compuesto se obtuvo originalmente el ácido acetilsalicílico, que ha dado lugar a la medicina más consumida en el mundo, la aspirina. La corteza de este noble árbol nos ofrece una sustancia acaso menos potente que el medicamento, pero libre de sus efectos negativos sobre las mucosas gástricas. Será un recurso ideal para mitigar el dolor en procesos gripales y catarros con trancazo, para bajar las décimas de fiebre y para aliviar el dolor lumbar y las cefaleas. Combate también el dolor de las articulaciones en reumatismos y gota, el provocado por neuralgias como la ciática, asi como los espasmos gastrointestinales. Como la aspirina, también el sauce blanco se indica en la prevención de coágulos.
Precauciones: Debe ser evitado por quien presente intolerancia a los salicilatos, asi como en pacientes con gastritis y úlcera gastroduodenal.
Formas de aplicación: En decocción o maceración de la corteza (hasta 3 tazas al día), en extracto líquido y tintura, en cápsulas y comprimidos.
Nuestro remedio: Para aliviar el lumbago, probamos la fórmula que combina a partes iguales sauce blanco, harpagofito y viburno, más anís estrellado. 10 g de cada planta por medio litro de agua. Hervimos 3-4 minutos, dejamos en infusión unos 10 minutos y colamos. También se usa la corteza, puesta a macerar toda la noche, de la que se debe tomar tres tazas al día, edulcoradas con miel de romero.
 
2- Harpagofito, para el dolor reumático
El tubérculo del harpagofito Harpagophytum procumbens D. C. ya había venido siendo utilizado por los pueblos indígenas del Transvaal y el Kalahari en Sudáfrica desde la antigüedad, pero demostradas sus excelentes virtudes antiinflamatorias como cura natural para el reuma, ha sido objeto de la codicia de las industrias farmacéuticas y de una recolección descontrolada, que a punto ha estado de ponerla en peligro de desaparecer de sus hábitas originales. Hoy día el harpago es una de los remedios estrella de cualquier herbolario para tratar el dolor, a pesar de su elevado precio.
Principios activos: Glicósidos iridoides (harpagósido, procúmbido, harpágido), fitosteroles, harpagoquinona, ácidos triterpénicos, flavonoides, aceite esencial.
Propiedades: Antiinflamatorio, analgésico, diurético uricosórico, antiespasmódico, hipolipemiante, digestivo, aperitivo, hipoglucemiante.
A quien conviene: El harpago constituye el gran recurso herbario para enfrentarse a todo tipo de inflamación articular o reumática, como la artritis, la artrosis y la gota. Disminuye de forma gradual la inflamación y elimina el dolor cuando existe. Se indica igualmente como apoyo para aliviar los dolores en fibromialgias, lumbalgias, bursitis -inflamación de las articulaciones del codo-, fibrositis y traumatismos varios. Tal es su eficacia, que muchas veces permite la reducción en la administración de corticoides y antiinflamatorios en tratamientos prolongados, evitando así los efectos secundarios de estos medicamentos. El harpago tiene otras muchas indicaciones, como tónico digestivo y diurético, y se considera beneficioso para reducir las tasas de colesterol y de glucosa en sangre, asi como para prevenir la formación de cálculos biliares, entre otras.
Precauciones: Debe ser evitado en el embarazo o si se piensa estarlo a corto plazo, asi como por pacientes con gastritis y úlcera gastroduodenal, y es preciso ajustarse a las dosis establecidas, puesto que una sobredosis puede provocar problemas hepáticos.
Formas de aplicación: En cápsulas y comprimidos (hasta 6 unidades al día), en tintura, extracto líquido y el tubérculo troceado o en polvos para decocción.
Nuestro remedio: Para el dolor articular, combinamos una cucharada de harpago, otra de raíz de calaguala y dos de anís estrellado, por 1/4 de l. de agua. Hervimos entre 6 y 8 minutos, dejamos en maceración toda la noche y colamos. Se recomiendan tres vasos diarios, antes de las comidas.
 
3- Primavera, alivio para golpes y contusiones
La primavera Primula veris L. es de las primeras plantas en florecer en primavera, de ahí tal vez su nombre. Crece en bosques y prados frescos del tercio norte de la península y montañas del centro y sur. Con fines medicinales se cosecha el rizoma y la raíz, en otoño, y de forma más ocasional, las hojas y flores, en plena floración.
Principios activos: Heterósidos fenólicos (primulaverósido), saponósidos triterpénicos, flavonoides, derivados salicílicos, taninos, aceite esencial.
Propiedades: Antiinflamatoria, antiespasmódica, analgésica, expectorante, mucolítica, diurética, antiedematosa, febrífuga, antialérgica.
A quien conviene: En caso de golpes, contusiones, hematomas y también para reducir la inflamación y el dolor de las articulaciones, los remedios con primavera, aplicados por vía externa, se muestran muy eficaces. Se usa también como planta balsámica para reducir la mucosidad y despejar las vías respiratorias en resfriados, procesos gripales y bronquitis, asi como para calmar el dolor muscular asociado, como el dolor al toser. Se indica en alergias respiratorias y estados asmáticos leves.
Precauciones: Evitar dosis elevadas.
Formas de aplicación: La decocción para aplicar en friegas, baños locales y compresas, o bien en uso interno (3 tazas tras las comidas), infusión de hojas y flores, y extracto líquido.
Nuestro remedio: Para rebajar la hinchazón en golpes, cogemos un puñado de hojas frescas de primavera, las machacamos bien y las aplicamos en cataplasma sobre la zona dolorida, sujetando con una venda. También se usa la decocción del rizoma, como loción, con la que empapamos unas compresas y aplicamos de igual modo.
 
4- Ulmaria, alivio para la gota
La ulmaria o reina de los prados Filipendula ulmaria L. es, como indica su nombre, una planta propia de los prados húmedos de montaña, donde puede llegar a ser dominante. Lo de ulmaria es por la forma de sus hojas, que pueden recordar a las del olmo. Ya era una planta considerada sagrada por los druidas centroeuropeos, y de ella se decía que con su sola fragancia conseguía alegrar el corazón y avivar los sentidos. Se cosechan las flores y hojas, en plena floración.
Principios activos: Glucósidos fenólicos, espireósido, glucósido de quercetol, flavonoides, salicilatos, aceite esencial con salicilaldehido, taninos.
Propiedades: Antiinflamatoria, antirreumática, analgésica, antitérmica, sudorífica, diurética, astringente.
A quien conviene: De nuevo estamos ante un precursor del ácido acetilsalicílico. El espireósido, en contacto con la flora bacteriana, da lugar a salicilato de metilo. Los diferentes componentes bioquímicos de la ulmaria (salicilatos, flavonoides, taninos)  confieren a la planta una actividad similar a la de la aspirina, pero con un menor riesgo de que por un uso prolongado pueda generar molestias o irritaciones gástricas. La ulmaria se indica para remitir el dolor y rebajar las inflamaciones de tipo reumático y la gota, el dolor de espalda, las neuralgias y dolor por trancazo y molestias musculares que acompañan a las afecciones respiratorias como la gripe y la bronquitis. Combate la fiebre, los espasmos gastrointestinales y la acidez estomacal, y previene la formación de coágulos.
Precauciones: Evitar en caso de que exista intolerancia a los salicilatos, si se siguen tratamientos con anticoagulantes y en pacientes con úlcera gastroduodenal.
Formas de aplicación: En infusión simple o combinada, en tintura, jarabe, cápsulas, comprimidos y decocción para uso externo en friegas, baños o compresas.
Nuestro remedio: Para el dolor reumático, la decocción de 30 g de ulmaria por litro de agua. Se hierve 15 minutos, se deja en reposo, se cuela y se aplica, empapando unas gasas o compresas, sobre el área dolorida.
 
5- Matricaria, para la jaqueca
Originaria del Mediterráneo oriental, la matricaria Tanacetum parthenium (L.) Schultz, se cultiva en huertos y jardines, y es también frecuente en las proximidades de masías y caseríos. Es una valiosa planta medicinal, que antiguamente se había empleado para combatir los estados de histeria de las mujeres que estaban de parto, y las fiebres palúdicas. Se cosechan las hojas y flores.
Principios activos: Aceite esencial con alfa-pineno y borneol, lactonas sesquiterpénicas (partenólido), sesquiterpenos (alcanfor), ácido antémico, flavonoides (tanetina), taninos.
Propiedades: Analgésica, antiinflamatoria, amarga, estimulante digestivo, antiespasmódica, emenagoga, antiséptica, antirreumática.
A quien conviene: Principalmente a aquellas personas propensas a padecer ataques de migraña de manera periódica. Diferentes estudios clínicos han probado la eficacia del partenólido para inhibir la liberación de serotonina, hormona vinculada a la aparición de los ataques migrañosos. Los remedios con matricaria, planta que debe asociarse a otras que atenúen su sabor en exceso amargo, se muestran muy válidos para aliviar los síntomas propios de la jaqueca y para reducir su incidencia. Se indica también como alivio en menstruaciones dolorosas y como regulador del flujo menstrual, en trastornos de la menopausia, como cefaleas y tensión muscular, para calmar el dolor reumático y las neuralgias. Ayuda a recobrar el apetito y a combatir los espasmos nerviosos que se dan en la digestión.
Precauciones: Se debe evitar en el embarazo y la lactancia, y no será bien aceptado por niños de corta edad a causa de su sabor muy amargo.
Formas de aplicación: En infusión combinada, hasta tres tazas diarias antes o después de las comidas, en tintura y en cápsulas.
Nuestro remedio: Para migrañas persistentes, matricaria con mejorana, albahaca y romero a partes iguales. Una cucharada sopera rasa de la mezcla por taza de agua. Depositar las hierbas en una tetera, derramar sobre ellas el agua recién arranca a hervir, y dejar en infusión 8-10 minutos. Colar y añadirle miel de romero para atenuar la amargor. Tomar hasta 3 vasos al día, en ayunas.
 
6- Betónica, para aliviar la tensión muscular por nervios
La betónica Stachys officinalis Trevisan es una planta labiada, emparentada con salvias y lavandas, que crece en prados, claros de bosques y herbazales. Considerada poco menos que una panacea en la antigüedad -se decía que curaba cuarenta y siete enfermedades-, hoy día se usa mucho menos que otras plantas de su familia.
Principios activos: Aceite esencial, betocinina (betaína), colina, taninos, lactonas sesquiterpénicas (estachydrina), ácidos fenólicos (cafeico, rosmarínico)
Propiedades: Analgésica, antiinflamatoria, hipotensora, sedante, antiespasmódica, emenagoga, astringente, febrífuga, cicatrizante.
A quien conviene: A personas afectadas de cefaleas y dolor muscular, especialmente provocados por estados de tensión nerviosa y estrés prolongados. Ayuda a combatir la hiperactividad, la irritabilidad, las indigestiones por nervios y la tensión premenstrual. Se ha considerado un buen remedio para controlar la tensión sanguínea, especialmente en personas de carácter nervioso o sometidas a estrés.
Precauciones: No tomar en caso de úlcera gastroduodenal.
Formas de aplicación: En infusión, dos tazas diarias, en tintura y extracto líquido.
Nuestro remedio: Para rebajar la tensión muscular y acabar con el dolor de cabeza, la infusión de betónica, melisa y menta, una cucharada de la mezcla por taza. Infundir 8-10 minutos, colar y tomar una o dos tazas al día, en función de la intensidad y persistencia del dolor.
 
7- Guayaco, alivio para las contracturas
Originario de las selvas húmedas de Sudamérica, la resina del guayaco Guaiacum officinale L. ya procesada se puede encontrar en muchos herbolarios europeos y se ha integrado a numerosas fórmulas magistrales, pero el conocimiento que los pueblos indígeneas tenían del valor curativo de este árbol viene de muy antiguo y se ha transmitido de generación en generación a través del saber de los chamanes. Junto a la resina, se cosecha también la albura del tronco, y en menor medida las hojas y los frutos.
Principios activos: Resinas, guayacirresinol, ácidos guayacónico y guayacínico, aceite esencial, lignanos, alcoholes sesquiterpénicos (guayol), almidón, vanilina.
Propiedades: Analgésico, antiinflamatorio, rubefaciente a nivel externo, diurético uricosórico, sudorífico por vía oral.
A quien conviene: Por un lado, los remedios con guayaco pueden ser de gran utilidad a deportistas y excursionistas para aliviar el dolor provocado por contracturas musculares, esguinces y por golpes o caídas con impacto. No es menos útil para calmar el dolor de las articulaciones y el que acompaña a los ataques de gota. Es además un excelente remedio diurético, que además de combatir los excesos de ácido úrico, se muestra eficaz contra los edemas,  la tensión alta y las inflamaciones genitourinarias.
Precauciones: Puede resultar irritante en uso externo sobre pieles sensibles.
Formas de aplicación: Decocción o maceración de la albura, resina en polvos, extracto líquido y tintura.
Nuestro remedio: Para aliviar el dolor de contracturas, unas 15-20 gotas de tintura de guayaco disueltas en agua y aplicadas como loción en masaje sobre el área dolorida.
 
8- Otras plantas útiles para el dolor:
-- Árnica, sobre contusiones e hinchazones, en infusión, tintura diluida en agua, en cremas y pomadas, y la planta fresca en cataplasma.
-- Rabo de gato, sobre contusiones y dolor articular, en infusión para friegas. masajes o baños locales.
-- Pasionaria, como relajante muscular, en infusión y en cápsulas
-- Uña de gato, sobre inflamaciones articulares, en decocción o tintura
-- Alcanfor, para golpes, caídas o contusiones, en alcohol de vitaminas
-- Lúpulo, para migrañas y tensión muscular, en infusión para baños o compresas.
-- Albahaca, para migrañas e inflamaciones artríticas, en lociones, macerado de hojas y el aceite esencial.
-- Clavo, para el dolor de muelas, en infusión para colutorios y el aceite esencial
-- Grama de las boticas, para consolidar fracturas, en decocción
-- Fresno, para el dolor artrósico, en lociones, pomadas e infusión.
 
9- Aromaterapia: Los aceites esenciales de clavo, alcanfor, albahaca, romero, menta, milenrama, manzanilla, pimienta negra, mejorana, lavanda y jengibre, aplicados por vía de masaje y baño.
 
 
PLANTAS PARA LA MUJER    
 
Si por un lado hay mujeres que parecen haber firmado un pacto de no agresión con su ciclo hormonal y apenas sufren desajustes, las hay por otro que no tienen tanta suerte, y para las cuales los ritmos biológicos por los que atraviesa su organismo suponen una fuente de problemas más o menos importantes. Las hormonas femeninas son indispensables tanto para el bienestar físico como mental de la mujer, de ellas depende en buena medida su resistencia, su dinamismo y su vida sexual. El equilibrio hormonal suele ser muy complejo, de manera que el aumento en la producción de determinadas hormonas puede llevar consigo la disminución de las otras, lo que acarrea desequilibrios en la salud. El estrógeno es sin duda la hormona femenina mejor conocida, asociada con la energía vital, con la fertilidad o con la tersura de la piel, pero su sobreabundancia puede provocar desasosiego, insomnio, pérdida de memoria, problemas de retención de líquidos o desequilibrios en los niveles de azúcar en la sangre, asi como afecciones mucho más serias como endometriosis, quistes mamarios, etc. Una disminución en cambio en los estrógenos puede estar acompañada de irritabilidad, ansiedad, sofocaciones y a la larga, aparición de osteoporosis, como ocurre tras la menopausia. La otra hormona importante en la salud de la mujer es la progesterona, responsable, entre otros aspectos, del equilibrio emocional, de la tensión nerviosa, del fortalecimiento muscular, etc. Se cree que un equilibrio entre ambas hormonas facilita la permanencia de un estado de buena salud en la mujer, y que por contra, un desequilibrio entre ambas, puede dar origen a trastornos cíclicos o persistentes. El síndrome premenstrual, los dolores menstruales, las menstruaciones abundantes o dolorosas, la endometriosis, la candidiasis vaginal, los trastornos de la menopausia y las infecciones urinarias como la cistitis, asi como otros problemas no exclusivos de la mujer como las migrañas persistentes, el estrés y los procesos depresivos leves son dolencias frecuentes, que en mayor o menor medida pueden ser tratadas o apoyadas con remedios naturales, como las que aportan las plantas medicinales. Aquí hemos seleccionado 7 de las más recomendables.
 
1- Salvia, para evitar los sudores
La salvia Salvia officinalis L. es de aquellas plantas que parecen servir para todo, como ya ilustra un dicho italiano del siglo XIII, que rezaba asi: "¿De qué podrá morir un hombre que tiene salvia en su huerto?" Propia de collados secos y prados pedregosos de la Europa mediterránea, se cultiva con frecuencia en parques, jardines y viveros. Las hojas y sumidades se cosechan justo antes de que se abran las flores.
Principios activos: Aceite esencial con tuyona, borneol y alcanfor, ácidos fenólicos (rosmarínico, cafeico), flavonoides, glucósidos diterpénicos.
Propiedades: Estrogénica, antisudoral, antiespasmódica, antiséptica, digestiva, carminativa, tónica, hipoglucemiante.
A quien conviene: La salvia es un remedio muy útil como estimulante hormonal para mujeres en periodo menopáusico, porque ayuda a adaptarse a los cambios hormonales y a aliviar algunos de los síntomas de este periodo, como el exceso de sudor o los sofocos nocturnos, asi como los estados de debilidad y astenia. No será menos eficaz para las mujeres más jóvenes, afectadas de menstruaciones irregulares, dolorosas o escasas, como un regulador del flujo menstrual. La salvia es un estimulante digestivo, que ayuda a eliminar la formación de gases, la hinchazón abdominal y los meteorismos. A nivel externo, los remedios con salvia se emplean para tratar la vulvovaginitis y la distrofia de la mucosa vulvovaginal.
Precauciones: Se debe evitar en el embarazo y la lactancia, en caso de insuficiencia renal, tumores mamarios y si se está siguiendo un tratamiento con estrógenos. No tomar el aceite esencial por vía oral, por ser potencialmente neurotóxico. Procurar tratamientos breves y discontinuos.
Formas de aplicación: En infusión (hasta 3 tazas diarias), en tintura, extracto líquido, cápsulas, el aceite esencial (aromaterapia) y la decocción para lavados, baños, gargarismos y compresas.
Nuestro remedio: Para aliviar los sudores, probamos la infusión de salvia sola, una cucharada sopera por taza. Cuando el agua arranca a hervir, la vertemos sobre la hierba seca y dejamos que repose 10 minutos, colamos y edulcoramos con miel. Tomamos 3 tazas al día, en periodos breves y discontinuos. La decocción de salvia -unos 30 g por litro-, se aplica en forma de lavado o irrigación en caso de vulvovaginitis.
 
2- Sauzgatillo, para regular la regla
Arbusto aromático de riberas y ramblas, exclusivo del litoral mediterráneo y norte de África, el sauzgatillo Vitex agnus-castus  L. alude en su denominación científica -agnus por casto y puro en griego- a su supuesta capacidad para disminuir la líbido. Lo cierto es que una de las mejores plantas para asegurar la salud de la mujer. Entre mediados y finales de verano florece, mostrando unas bellas espigas de flores azuladas o rosadas. Con fines medicinales se cosechan las sumidades floridas y los frutos.
Principios activos: Aceite esencial con cineol, glucósidos iridoideos (aucubósido, agnósido), flavonoides (casticina), alcaloides (viticina), principios amargos, taninos.
Propiedades: Regulador hormonal, progesterógeno, galactógeno, sedante, antiespasmódico.
A quien conviene: Diversos estudios han probado la eficacia de los remedios con sauzgatillo para reducir la acción de los estrógenos e incrementar la actividad de la progesterona ejercida desde la glándula pituitaria, lo que contribuye a equilibrar la producción de ambas hormonas por los ovarios durante el ciclo menstrual y evitar asi los diferentes trastornos asociados. Por ello el vitex está especialmente recomendado a mujeres con menstruaciones dolorosas, abundantes o demasiado escasas y para aliviar los síntomas del síndrome premenstrual, como la presión o hipersensibilidad en los pechos, la hinchazón abdominal y la irritabilidad nerviosa. Asi mismo es útil para mitigar determinados síntomas vinculados a la menopausia, como mareos, sofocaciones y estados de abatimiento. Se indica igualmente para calmar los espasmos gastrointestinales, y como sedante, en caso de palpitaciones nerviosas, insomnio y vértigos.
Precauciones: No se debe simultanear con tratamientos con hormonas femeninas.
Formas de aplicación: En infusión (2-3 tazas diarias), en extracto líquido y cápsulas.
Nuestro remedio: Como regulador hormonal, contamos con la fórmula que combina a partes iguales flores y frutos de sauzgatillo, con salvia y espino albar. Una cucharada sopera de la mezcla por vaso. Se hierve dos minutos, se deja reposar 10 más y se cuela. Lo ideal es tomarlo en ayunas, un par de veces al día.
 
3- Cimífuga, apoyo en la menopausia
La cimífuga Cimicifuga racemosa es una bella planta originaria de Norteamérica, que crece de forma natural en setos y márgenes de bosques. Los pueblos nativos ya la utilizaban para combatir los dolores reumáticos y los problemas de la mujer. Con fines medicinales se cosecha la raíz, en otoño.
Principios activos: Glicósidos triterpénicos (cimicifugósido), isoflavonas, derivados del ácido salicílico, taninos.
Propiedades: Estrogénica, antisudoral, sedante, antiespasmódica, antiinflamatoria, antirreumática, emenagoga, astringente.
A quien conviene: La raíz de cimífuga contiene una isoflavona, la formononetina, que actúa de forma similar a los receptores de estrógeno, reduciendo la concentración de la hormona LH. Se ha observado su eficacia para disminuir o eliminar los síntomas neurovegetativos y psicológicos típicos de la menopausia, como sudores nocturnos, bochornos, hipersudoración, dolor de cabeza, vértigo, palpitaciones, nerviosismo, irritabilidad, insomnio, etc. Es muy útil para la artritis y la artrosis, especialmente cuando se asocia a la menopausia. La cimífuga se indica igualmente para combatir los diferentes síntomas del síndrome premenstrual, como la hipersensibilidad en los pechos, para corregir las alteraciones en el flujo menstrual, en amenorreas y dismenorreas, y como apoyo para aliviar las diferentes inflamaciones pelvianas, como la endometritis (inflamación del útero).
Precauciones: Los tratamientos no deben exceder los 6 meses de consumo continuado. Está contraindicada a mujeres menores de 18 años, asi como durante el embarazo y la lactancia.
Formas de aplicación: En tintura, disuelta en agua o zumo de frutas, en decocción de la raiz (2 tazas diarias) y en cápsulas.
Nuestro remedio: Para los cambios de humor y la irritabilidad nerviosa en la menopausia, decocción de raíz de cimífuga y calaguala a partes iguales. Hervir dos minutos y mantener toda la noche en maceración. Colar y tomar a lo largo de la jornada.
 
4- Bolsa de pastor, ayuda para las hipotensas
La bolsa de pastor Capsella bursa-pastoris (L.) Med. recibe este curioso nombre por la forma de sus aplanados frutos, que pueden recordar el zurrón de un pastor, pero en muchos puntos de Castilla se la conoce también como pan y quesillo. Es una planta arvense y ruderal, muy ligada al ser humano, que crece en márgenes, descampados y huertos, y que puede encontrarse florida durante casi todo el año. Se cosechan las sumidades floridas.
Principios activos: Colina, histamina, tiramina, acetilcolina, diosmina, flavonoides (rutinósido), alcaloides (burserina), vitamina C, taninos, aceite esencial, saponósidos, sales potásicas.
Propiedades: Astringente, hemostática local, vasoconstrictora, hipertensora, diurética, antiséptica, emenagoga, cicatrizante..
A quien conviene: Los remedios con bolsa de pastor pueden ser un aliado muy estimable para la mujer joven, afectada por menstruaciones abundantes o irregulares, que la mantienen debilitada o anémica, asi como para ayudar a subir un poco los niveles de tensión sanguínea en mujeres hipotensas, propensas a sufrir decaimientos y mareos. Como remedio diurético, la bolsa de pastor no es menos eficaz para aliviar las infecciones en el tracto urinario, como la cistitis, dolencia que también afecta a muchas mujeres, de todas las edades. Se indica asi mismo para evitar la retención de líquidos y los edemas, con síntomas como la hinchazón de piernas y pies. A nivel externo, se usa para atajar las hemorragias nasales, el sangrado bucal y para favorecer la cicatrización de las heridas cutáneas.
Precaución: Está del todo contraindicada en el embarazo y la lactancia por su contenido en alcaloides, asi como en caso de tensión alta y si se toman medicamentos antidepresivos con IMAO. Procurar en cualquier caso tratamientos breves y discontinuos.
Formas de aplicación: En infusión combinada (hasta 3 tazas al día), tintura y extracto líquido. La decocción para uso externo en lavados, friegas, colutorios o gargarismos.
Nuestro remedio: Para la inflamación de la vejiga con sangrado en la orina, contamos con la fórmula que combina a partes iguales bolsa de pastor, con cola de caballo y ortiga verde. Necesitaremos cuatro cucharadas soperas de la mezcla por litro de agua. Hervimos 5 minutos y dejamos 10 más en reposo. Se debe beber a pequeñas dosis durante toda la jornada, la primera toma en ayunas y el resto después de haber comido algo.
 
5- Trébol de prado, para prevenir la osteoporosis
El trébol de prado Trifolium pratense L. es una hierba muy común, en prados y herbazales de todo el país, y se ha usado vastamente como forraje para el ganado. Antiguamente, en tiempos de Santa Hildegarda, este trébol se había empleado para curar "la ofuscación de la vista", y a nivel rural, se había usado para aumentar el apetito, contra el estreñimiento crónico y para estimular la orina.
Principios activos: Glucósidos (trifolina), flavonoides, ácidos fenólicos, ácidos salicílico y cumarínico, isoflavonas, cumarinas, ácidos grasos, almidón.
Propiedades: Estrogénica, antiespasmódica, antisudoral, diurética, digestiva, aperitiva, expectorante, tónica.
A quien conviene: Por ser una fuente nada desdeñable de isoflavonas, estudios recientes están probando la eficacia de esta planta como regulador hormonal, en trastornos específicos de la menopausia, con efectos similares a la soja. Las isoflavonas actúan como reguladores hormonales con una importante acción estrogénica, por lo que su toma, bajo estricto control médico, puede ser una ayuda a tener en cuenta para aliviar los síntomas del síndrome premenstrual, como el dolor de pechos, y los síntomas de la menopausia vinculados a un nivel bajo de estrógenos, como la tensión muscular, la migraña y el resecamiento de la piel. Reduce sensiblemente la incidencia en la aparición de sofocos y sudoraciones nocturnas y se ha demostrado que puede frenar o cuanto menos ralentizar el proceso de pérdida de masa ósea en mujeres premenopáusicas con riesgo a padecer de osteoporosis con los años. Como diurética, ayuda a estimular la orina, facilita la eliminación de toxinas y previene la retención de líquidos, con los síntomas asociados.
Precauciones: No debe tomarse durante el embarazo o la lactancia, o si se toman píldoras anticonceptivas. Por su similitud con los estrógenos, debe también ser evitado por mujeres que hayan padecido de cáncer de mama. Y en general, como terapia hormonal, su consumo debe estar estrictamente vigilado por un médico especialista.
Formas de aplicación: En tintura, en extractos estandarizados de isoflavonas, cápsulas y la planta fresca o seca para infusión.
Nuestro remedio: Una fórmula depurativa, para aliviar los edemas es la que combina trébol de prado con diente de león, vellorita y cola de caballo, a partes iguales. 3 cucharadas de la mezcla por litro de agua. Hervimos un minuto, dejamos 10 en infusión y colamos. Lo ideal es beber a lo largo del día, a pequeñas dosis. Para prevenir la osteoporosis, se recomiendan tratamientos, establecidos por un especialista, con trébol en cápsulas.
 
6- Onagra, para rejuvenecer la piel
La onagra Oenothera biennis L. es una planta norteamericana de bellas y grandes flores amarillas, que no es difícil encontrar como subespontánea en muchos lugares de Europa, incluido el norte de la península, apareciendo en riberas fluviales, márgenes de pastizales, marismas y arenales marinos. Se cosechan sus semillas, de las que, sometidas a presión en frío, se obtiene un aceite vegetal de alto valor terapéutico.
Principios activos: Ácidos grasos poliinsaturados (linoleico, gamma-linolénico, palmítico, esteárico), vitamina E.
Propiedades: Emoliente, antiinflamatoria, antirreumática, emenagoga, hipoglucemiante, hepatoprotectora, tranquilizante, protector cardiovascular, antialérgica, antiséptica, inmunoestimulante, dermoprotectora.
A quien conviene: El aceite de onagra es muy rico en ácidos grasos, como el gamma-linolénico, precursor de las prostaglandinas de tipo E, a las que se les atribuye un papel importante como reguladoras de muchos procesos de nuestro metabolismo, por ello este aceite cuenta con numerosas indicaciones. Aplicado externamente el aceite de onagra fortalece la salud de la piel a nivel celular, previene la acumulación de sebo y ejerce un efecto hidratante, que evita su agrietamiento y el envejecimiento prematuro. Tomado por vía oral, previene los accidentes cardiovasculares, ayuda a controlar la tensión sanguínea y la diabetes, rebaja la inflamación de las articulaciones, combate las alergias y tiene un efecto destacado como regulador hormonal. Contribuye a disminuir la incidencia de los síntomas del síndrome premenstrual, asi como los vinculados al periodo perimenopáusico, como la pérdida de elasticidad de la piel, los episodios de irritabilidad nerviosa, la falta de motivación y el dolor en las articulaciones.
Precauciones: Evitar si se están tomando anticoagulantes y medicamentos con estrógenos, o en cualquier caso, consultar con el médico. Evitar también en caso de existir ataques epilépticos, y procurar no superar las dosis prescritas.
Formas de aplicación: El aceite de onagra en perlas de gelatina o cápsulas, y el aceite o emulsión para su aplicación tópica.
Nuestro remedio: Para problemas de piel, 3 perlas al día, coincidiendo con las comidas. Como regulador hormonal, 3 perlas al día, en tratamientos de 3 a 4 meses, y posteriormente, reducir a 2.
 
7- Artemisa, para el dolor menstrual
Planta de ambientes húmedos, que crece en márgenes y herbazales, la artemisa Artemisia vulgaris L. recibe su nombre, según nos cuenta Font Quer, por Artemis, el otro nombre de Diana, la diosa dispuesta siempre a socorrer a las mujeres parturientas. Hay en la Provenza un dicho, que traducido, reza: "Si las mujeres supieran la virtud de la artemisa, siempre la llevarían prendida de la camisa". Los centuriones romanos colocaban ramilletes de artemisa en sus sandalias para protegerse los pies de posibles heridas y rasguños. Se cosechan las sumidades en flor, que se dejan secar a la sombra.
Principios activos: Aceite esencial con cineol, linalol, alcanfor y tuyona, flavonoides (rutósido), lactonas sesquiterpénicas, cumarinas (umbeliferona), fitosteroles.
Propiedades: Estrogénica, estimulante digestivo, carminativa, antiséptica, antimicrobiana, astringente.
A quien conviene: La artemisa cuenta con numerosos usos tradicionales, sobre todo como estimulante de la digestión. Destaca también como un notable regulador  hormonal, muy útil para la mujer joven, para aliviar la tensión menstrual, en reglas especialmente dolorosas o para regular el flujo menstrual en amenorreas y metrorragias, y se le atribuye el poder de favorecer la fecundidad. No es menos eficaz para la mujer para combatir los gases, la hinchazón, los meteorismos y las flatulencias, que a menuda se presentan en el periodo.
Precauciones: No se debe tomar durante el embarazo y la lactancia, especialmente el aceite esencial.
Formas de aplicación: En infusión, extracto líquido, tintura, jarabe y e aceite esencial en uso externo.
Nuestro remedio: Una fórmula muy completa, que favorece la irrigación sanguínea a nivel ovárico, recomendada para facilitar la fecundación y como regulador hormonal, es la que elaboramos con 20 g de artemisa, 20 más de hierbaluisa y 5 de senecio. Una cucharada sopera de la mezcla por vaso de agua. Hervimos durante un minuto y mantenemos 10 más en infusión. Se deben tomar dos vasos diarios, por la mañana y poco antes de acostarnos, desde los 9 días antes de la regla.
 
8- Otras plantas útiles:
-- Abrótano hembra, para las menstruaciones dolorosas, en infusión o polvos.
-- Angélica china, para la tensión menstrual y la menopausia, en decocción y cápsulas
-- Ñame silvestre, para la fecundidad, dolor en el parto y los calambres musculares, en tintura y decocción
-- Viburno, para el dolor muscular y las varices, en decocción para uso interno y externo.
-- Pie de león, para regular el ciclo menstrual, en infusión, extracto líquido y tintura.
-- Diente de león, para los edemas, en decocción, extracto y tintura.
-- Caléndula, para la candidiasis, en cremas, pomadas e infusión para lavados
-- Verbena, para la migraña, en infusión y cápsulas
-- Soja, para la menopausia, en cápsulas, comprimidos, extractos de isoflavonas, leche de soja y otros preparados que la contengan
-- Mijo del sol, para quistes mamarios, en infusión, extracto líquido, cápsulas y tintura.
-- Hipérico, para la depresión leve, en extracto líquido, cápsulas, perlas.
 
9- Aromaterapia: Aceites esenciales de rosa, incienso, gálbano, palmarrosa, nerolí o lavanda para las pieles envejecidas; aceites de ciprés, manzanilla, artemisa, salvia, perejil, angélica o milenrama para los trastornos menstruales; los aceites de pelargonio, ajo y lavanda para la candidiasis; y los aceites de rosa, jazmín, ylang ylang, pimienta negra, canela y cardamomo, para los problemas sexuales; aplicados en masaje, baños y vaporizadores.
 
 
 
PLANTAS PARA EL HOMBRE  
 
Como ocurre con la mujer, también el hombre debe lidiar con algunos problemas de salud que le son propios. Llegados a cierta edad, el hombre maduro debe hacerse más exigente con su salud y no descuidar determinadas recomendaciones tanto en la forma de alimentarse como en la de orientar sus hábitos de vida. Tener bajo control los niveles de tensión arterial, y de colesterol y triglicéridos, debe ser un imperativo irrenunciable para prevenir el riesgo futuro de accidente cardiovascular, algo que afecta más al varón que a la mujer, aun cuando las diferencias vayan acortándose. El estrés no es privativo del hombre, pero sí es cierto que parece un estigma asociado a muchas actividades profesionales desempeñadas preferentemente por los varones. El equivalente del ginecólogo para el hombre es el urólogo. Una revisión urológica anual la recomiendan los especialistas a partir de los 50 años. La hiperplasia prostática benigna o aumento no canceroso de la próstata llega a afectar a más de la mitad de los varones mayores de 60 años y hasta a un 90% de los mayores de 80. Los problemas en la micción y la micción nocturna frecuente son síntomas claros de esta dolencia. Tratarla a tiempo evitará patologías más graves como el cáncer de próstata. Los dolores reumáticos, a veces resultado de viejas lesiones deportivas, problemas sexuales como la eyaculación precoz, la falta de deseo sexual o la impotencia, y la calvicie son, en muy diferente medida, dolencias -o circunstancias de origen hormonal- que afectan de una manera especial al varón. Las plantas medicinales no serán la panacea, pero sí pueden revelarse como apoyos muy válidos para prevenir o retrasar la aparición de las patologías o cuanto menos de disminuir sus síntomas. Aqui hemos seleccionado cuatro de las más eficaces, destinadas esencialmente a tratar problemas de próstata y la atonía sexual, por cuanto otras patologías ya han sido tratadas en apartados anteriores.
 
1- Sabal, aliado de la próstata
El sabal Sabal serrulata Roem. et Schultz es una palmera de modesto porte, que crece en dunas y arenales de las costas del Atlántico, en Norteamérica y el Caribe. Especies similares se encuentran de forma dispersa en Centroamérica. Los pueblos originarios de esas zonas ya conocían los atributos medicinales de los dátiles mucho antes de la llegada de los colonos europeos, y al parecer los tenían como afrodisiacos. Maduran en otoño, momento en el cual se cosechan, y se dejan a secar a la sombra, tras haberles apartado las semillas.
Principios activos: Aceite esencial, fitosteroles, saponina esteriodal, polisacáridos, taninos.
Propiedades: Antiinflamatorio, regenerador del tejido prostático, antiandrogénico, anabólico, diurético, sedante, nutritivo.
A quien conviene: Las bayas del sabal pasan por ser hoy día uno de los principales recursos herbarios para aliviar los problemas de próstata en el varón. Están indicadas para frenar el aumento de la próstata o adenoma benigno de próstata, y para disminuir sus síntomas, como la micción frecuente o la dificultad para poder orinar. Se prescriben también para tratar la prostatitis o infección bacteriana de la próstata, una dolencia que puede aparecer a cualquier edad, y que en algunos casos puede provocar dolor testicular.
Las bayas del sabal ayudan a restaurar el tejido prostático y a recobrar el ritmo normal en las micciones. Se emplea igualmente, como diurético, para estimular la orina, reducir la infección en la vejiga y para evitar la retención de líquidos.
Precauciones: No se han descrito.
Formas de aplicación: Dátiles maduros o cocidos (hasta 60 g al día), en extractos líquidos, en tintura y en infusión, combinada con otras plantas como la cola de caballo.
Nuestro remedio: Para tratar los síntomas del adenoma benigno, combinamos frutos de sabal, con cola de caballo, hojas de gayuba e hinojo. Una cucharada sopera de la mezcla por vaso. Hervimos 2-3 minutos, dejamos que repose otros diez, y colamos. Le añadimos una pizca de miel de romero, y tomamos no más de dos tazas al día. Otra opción es la tintura de sabal, media cucharadita disuelta en zumo de frutas, a tomar una vez al día durante 4-5 meses.
 
2- Gayuba, el mejor antiséptico urinario
La gayuba Arctostaphylos uva-ursi Sprengel es un arbusto rastrero que tapiza los bosques de coníferas en áreas de montaña. Su denominación científica, en griego y latín, alude a la querencia que los osos tienen por sus atrayentes bayas rojas. Con fines medicinales se emplean las hojas.
Principios activos: Heterósidos hidroquinónicos (arbutina), ácido ursólico, abundantes taninos, flavonoides, alantoína.
Propiedades: Antiséptico urinario, hemostática, astringente, antidiarreica, diurética, antimicrobiana, antibacteriana.
A quien conviene: Por efecto de la flora bacteriana intestinal, la arbutina se hidroliza, liberando desde el hígado hidroquinona, que por via sanguínea llega al riñón y se elimina a través de la orina. Es esta última sustancia la que confiere a la gayuba su fuerza para combatir las infecciones en las vías urinarias y que hacen de ella, según muchos expertos, el más eficaz antiséptico urinario. Los herbolarios la consideran una herramienta muy valiosa para combatir las infecciones en todo el tracto urinario, incluido en la próstata o prostatitis. Se indica también para tratar las infecciones renales y para favorecer la expulsión de arenillas del riñón. Como depurativa, en uso tópico, se indica en dermatitis, granos y úlceras de la piel.
Precauciones: Por la presencia de taninos, está contraindicada en caso de gastritis y úlcera gastroduodenal, asi como a mujeres embarazadas.
Cómo se aplica: En infusión (hasta tres tazas diarias), en decocción, maceración, extracto líquido y tintura.
Nuestro remedio: Para remitir la infección en la próstata, contamos con una fórmula diurética de gran eficacia que combina la gayuba con cola de caballo, enebro, epilobio Epilobium parvifolium y anís estrellado. Hervimos durante un minuto cuatro cucharadas sopera de la mezcla por litro de agua, dejamos en infusión 10-15 minutos y vamos tomando a lo largo del día, a pequeñas dosis.

3- Abrojo, como estimulante sexual
Planta rastrera y reptante, propia de caminos y descampados, el abrojo Tribulus terrestris L. luce unas pequeñas flores amarillas y un fruto llamativo, en forma de cápsula espinosa. Es común en todo el litoral mediterráneo y norte de África. Con fines medicinales se cosechan las sumidades floridas.
Principios activos: Flavonoides (kenferol, diosgenina, ruscogenina), saponósidos, alcaloides, ácidos grasos poliinsaturados (oleico, elaídico).


Un fort agraïment a Jordi Cerbian. Extret de : http://www.floracatalana.es/INICI/PLANTES%20I%20TRASTORNS.html